La atonía vuelve a gobernar en las bolsas europeas. Desde la apertura y hasta el cierre, el pulso entre los que buscan asegurar ganancias y los que pretenden extenderlas daba lugar a movimientos muy planos. El Ibex 35 apenas sube un 0,03% hasta los 9.208,7 puntos. Tercera sesión consecutiva por encima de los 9.200 enteros y segunda en la que se mueve menos de una décima.
Entre las que tiraban hacia abajo del índice español, varios de sus pesos pesados, como Telefónica y Repsol, que respectivamente se dejaban un 0,9% y un 1,7% al cierre de la sesión. La importancia de ambos valores en la cesta del índice ponían buena parte del freno a los intentos del selectivo de continuar con su remontada con más brío.
A la baja por tercera sesión consecutiva, Indra. Aunque a primerísima hora intentaba el rebote tras dos sesiones de castigo en las que ha llegado a perder un 13% de su valor en bolsa. A la espera del relevo de Fernando Abril-Martorell como presidente, las ventas volvían a imponerse con descensos del 1,1% que han indultado por solo 9 céntimos la referencia clave de los 7 euros por acción.
Sin embargo, los descensos más profundos se los apuntaban Mapfre y ArcelorMittal, que se dejaban un 1,8% de su valor en bolsa en ambos casos. Hasta los 1,837 y los 25,1 euros por acción, respectivamente.
Al otro extremo, varios valores turísticos luchaban por tirar hacia arriba del índice al descontar un panorama cada vez más despejado para su actividad de cara a la temporada estival. IAG repuntaba un 2,2% y Meliá Hotels conseguía avances del 2,1% para su gráfica. Sin embargo, Banco Sabadell (+2,7%) y Siemens Gamesa (+2,3%) tomaban la delantera en la tabla de revalorizaciones.
Una jornada más, el Ibex 35 conseguía la tarea de conservar los 9.200 puntos, que todavía suponen una cierta garantía para el éxito de futuras intentonas de escapada alcista. Por abajo, el soporte más relevante se encuentra en la zona de los 9.050 enteros.
En el Mercado Continuo, Neinor Homes se situaba al frente de la tabla de revalorizaciones. La promotora inmobiliaria esquivaba con alzas del 6% un eventual paso por caja de los accionistas de Quabit, que hoy se estrenaban como accionistas propios a consecuencia de la integración mediante canje de títulos de la compañía alcarreña.
Por el mercado secundario de deuda, la rentabilidad de los bonos españoles cedía con fuerza por debajo del 0,5%. El convencimiento de que los bancos centrales mantendrán estímulos a pesar del tirón de la inflación va convenciendo a los inversores. La prima de riesgo se contraía así hasta los 66 puntos básicos.
En cuanto a la agenda macroeconómica de la sesión, destacaba el PIB del primer trimestre de Alemania, que se contraía un 3,4% en tasa interanual. Mientras tanto, en un tono más informativo, BME daba comienzo a una nueva edición del Foro MedCap, en la que se ha revelado que la bolsa española levantó seis veces más capital para sus cotizadas hasta abril que en el mismo periodo de hace un año.