Los descensos se impusieron una jornada más en las bolsas europeas. Y con fuerza creciente. El Ibex 35 cerró su tercera peor sesión del año con caídas del 2,4% hasta los 8.301,7 puntos. Retroceso a mínimos de los últimos cuatro meses después de cinco jornadas consecutivas de caídas, pero un alivio si se tenía en cuenta que por momentos se rozaron caídas del 3% y se perforaron los 8.300 enteros.
A este retroceso contribuyeron una vez más las firmas del sector turístico en toda Europa, mientras las cifras de contagios en Asia no dejaron de crecer y comprometer seriamente la recuperación económica global. IAG sufrió pérdidas del 5,6% y Aena retrocedió un 4%. Por su parte, Amadeus se dejó un 3,5% y un 3% retrocedió Meliá Hotels, y eso que Reino Unido levantó restricciones de viajes que mantenía vigentes hacia España en relación con la Covid-19.
Al grupo de bajistas se sumaron con fuerza valores como Ferrovial, con caídas del 4,2%. Además, varias entidades financieras se sumaron al lastre para el índice español, con caídas del 3,9% para Banco Sabadell, del 3,5% para BBVA y del 3,4% para el Santander, entre otros.
La energética Repsol también contribuyó al retroceso. Las acciones de la compañía se dejaron un 4,4% en una sesión de castigo para el petróleo a consecuencia del acuerdo entre Arabia Saudí y Emiratos Árabes para ampliar la producción de crudo a pesar de una demanda todavía debilitada.
Tan solo escaparon del rojo tres valores. Las farmacéuticas Almirall y PharmaMar se colocaban al frente de la tabla de revalorizaciones con avances del 1,3% y el 1,2%, respectivamente. A última hora, más comedida, la renovable Siemens Gamesa se sumó al grupo con subidas del 0,7% poco antes de anunciar al mercado un pedido de 322 megavatios para un parque eólico en India.
Más allá del Ibex 35, el protagonismo recayó sobre Ence. Sus acciones perdieron un 12,7% al término de la sesión en la que encajó el revés judicial para la continuidad de su planta papelera en la ría de Pontevedra.
Las bolsas europeas siguieron en bloque, pues los descensos son generalizados en toda la región, la estela de las bajadas generalizadas de los mercados asiáticos, con correcciones del 1,5% en la Bolsa de Tokio o del 2,1% en la Bolsa de Hong Kong.
En el mercado pesaron una jornada más los miedos a una recuperación mucho más débil de lo esperado debido al impacto de las nuevas variantes del coronavirus. Especialmente, la certeza de que el verano estará lejos de suponer la recuperación de actividad que se esperaba para el sector servicios. Algo que se amplificó por la ausencia de referencias macroeconómicas de calado.