Si no fuera por las caídas de Fluidra (-3,92%), de IAG (-2,20%) y de Endesa (-2,00%), las acciones de Iberdrola serían las que más bajarían del selectivo español ya que es el valor al que más le duele económicamente el zarpazo de las medidas anunciadas ayer tras el Consejo de Ministros.
Sus acciones han podido marcar precio de apertura por encima de los 10 euros, pero éstos eran inmediatamente perdidos en una sesión en la que ni Iberdrola ni Endesa lo están pasando bien.
Tal y como podemos apreciar en el siguiente gráfico, todavía quedaría pendiente la pérdida de los 9,70 euros para poder hablar de serio deterioro de su aspecto técnico, pero la pérdida de los mínimos de este verano en los 9,953 euros no poner las cosas fáciles para lo que resta de semana si este nivel no es recuperado antes del cierre de la sesión de hoy.
Así que debemos prestar atención a lo que ocurra en la zona de precios comprendida entre los 9,77 euros que se corresponde con los mínimos de este año y los 9,70 euros que son los mínimos del segundo semestre del año 2020.
Esta zona de precios es vital para el futuro en el medio y largo plazo ya que su pérdida le daría alas a un enorme triángulo recto bajista (no resaltado en el gráfico) que viene desarrollándose desde el inicio de este año. De hecho, muchos analistas también ven una figura de Hombro-Cabeza-Hombro que viene fraguándose desde el verano pasado y cuyo potencial movimiento nos llevaría a los 7,80 euros.
De ahí la importancia de no perder los 9,70 euros. Hoy por hoy es un soporte fuerte muchas veces testado como punto de pivote, pero realmente nadie sabe qué es lo que puede pasar con la confianza de los inversores en la empresa a pesar del riesgo regulatorio actual.