El Ibex ha cerrado la semana con subidas del 0,75% cerrando a 8.760 puntos, tras haber marcado máximos de estos días en 8.858 -hoy- y los mínimos el miércoles en 8.625.
La sesión de hoy, que ha acabado con un alza del 0,31%, ha sido bastante extraña ya que el Ibex ha ignorado en gran medida al resto de bolsas mundiales.
Se ha comportado igual cuando toda Europa subía antes de los vencimientos pero luego, cuando tras éstos, el resto de índices caían, seguía con avances por encima de los 8.800 puntos.
Hasta que la debilidad de Wall Street le venció (o quizás que ya pasó el vencimiento de nuestro selectivo) pero aún así, el resto de Europa cierra con caídas que han superado el 1%.
Se ha cumplido totalmente que las jornadas de vencimientos suelen ser volátiles, siendo la próxima semana de las más bajistas del año por estadística.
En la sesión el valor más bajista ha sido Arcelor (-4,29%) mientras en las subidas han destacado Grifols (+5,77%), IAG (+4,51%), Aena (+3,43%) e Indra (+3,04%).
Pero los dos grandes valores protagonistas de la semana han sido Iberdrola e Inditex, uno la cierra bajando un 6,95% y el otro con una subida del 7,78%
Si ayer fue Solaria quien, tras bajar un 8% cerró subiendo un 2%, hoy Grifols lo ha superado: ha llegado a bajar un 5%, luego ha subido casi el 7% y finalmente ha cerrado con avances del 5,77%, tras hacer una segunda lectura de la opa de Grifols sobre una compañía alemana.
En el campo corporativo, el Consejo de Naturgy ha rechazado la opa de IFM, como estaba previsto.Y siguen coleando las medidas del gobierno en el sector de las eléctricas y renovables.
El impacto de las medidas regulatorias del gobierno español en el sector, en el beneficio 2022-2025 se estima en aproximadamente un 10% en promedio para Iberdrola y alrededor del 15% para Endesa, según Goldman Sachs.
Las empresas de energías renovables respiran en bolsa después de que se haya publicado que el Gobierno estudia matizar las medidas para contener el precio de la luz, con el objetivo de excluir a determinados proyectos de renovables de los recortes que se plantean en el decreto-ley.
La rentabilidad de la deuda soberana europea ha tocado hoy máximos de dos meses, quizás influidos por las declaraciones de Kazaks (del BCE) afirmando que es probable que las perspectivas de inflación se revisen al alza.
Sin duda ese ha sido el factor más negativo para la renta variable. En el resto de activos, hoy cede levemente el precio del crudo (y el del gas natural) pero el Brent sigue por encima de los 75 dólares el barril.
El dólar sigue fortaleciéndose y el euro/dólar cae hasta los 1,1730, así como el oro lo hace hasta 1.750.
Las criptos, más tranquilas de lo habitual, tienen una jornada mixta con el bitcoin intentando alcanzar los 47.500 dólares y el ethereum bajando hasta los 3.465.
Entre los analistas existe la preocupación de que los crecientes costos del gas y la electricidad puedan comenzar a afectar los márgenes de ganancias de una variedad de sectores, desde las empresas cementeras hasta los fabricantes de automóviles.
“Para las acciones europeas, la tendencia podría poner en marcha una restricción de márgenes para las empresas y, por lo tanto, una sorpresa de perspectiva negativa cuando se publiquen las ganancias del tercer trimestre en octubre y noviembre”, según Peter Garnry, jefe de estrategia de acciones de Saxo Bank.
Uno de los sectores que se considera que corre mayor riesgo por el aumento de los precios de la electricidad es el de los materiales de construcción. La industria tiene la mayor proporción de costos de energía con respecto a los gastos totales de producción. El auge de la demanda de sus productos significa que los productores hasta ahora han podido trasladar los crecientes costos a los consumidores, dice Garnry, lo que explica por qué los inversores de capital no se han preocupado demasiado por la crisis energética hasta ahora.
La mayoría de las empresas industriales también cuentan con coberturas para suavizar los cambios en los precios de la electricidad y el gas. Pero cuanto más dure la crisis energética, mayor será el impacto para las industrias más expuestas. El CIO de BNP Paribas Wealth, Edmund Shing, dice que el sector automotriz, que ya se está recuperando de la escasez de semiconductores, podría experimentar más reveses.
Por otra parte, Kristalina Georgieva corre el riesgo de ver socavada su autoridad como jefa del FMI pocas semanas antes de una reunión anual de jefes de finanzas globales, luego de ser acusada de influir en un informe a favor de China cuando trabajaba en el Banco Mundial. Georgieva dijo que estaba "fundamentalmente" en desacuerdo con el hallazgo - de un bufete de abogados externo contratado por el Banco Mundial - de que había ejercido presión sobre el personal del banco para mejorar la clasificación de China en un informe económico.
El gobierno japonés dijo que el consumo privado siguió disminuyendo, mientras que los beneficios empresariales y la producción industrial siguen mostrando debilidad a pesar de los signos de recuperación.