La pandemia de coronavirus ha dejado una profunda huella en la industria aérea, hasta el punto de que, durante el año 2020, las aerolíneas mundiales han perdido alrededor de los 370 mil millones de dólares en ingresos, mientras que el tráfico de pasajeros aéreos se redujo un 60%.

Los aeropuertos internacionales, por el otro lado, perdieron unos 115.000 millones de dólares y los servicios de navegación aérea, 13.000 millones. 

En comparación, durante la crisis financiera de 2008, las aerolíneas perdieron unos 31.000 millones de dólares. Tras los atentados del 11 de septiembre, el sector tardó casi tres años en recuperarse por completo de la conmoción, mientras que los ingresos de las aerolíneas por los vuelos nacionales en EEUU se redujeron en 10.000 millones de dólares al año entre 2001 y 2006.

¿Cuánto tiempo tardará en recuperarse la industria aérea esta vez? Según las previsiones de McKinsey, sólo los viajes de negocios podrán recuperarse en un 80% de aquí a 2024.

La Asociación Internacional de Transporte Aéreo, por el otro lado, prevé que las pérdidas netas del sector aéreo en 2021 puedan alcanzar los 51.800 millones de dólares, y en 2022, más de 11.000 millones.

Así, en 2022 la IATA espera que la demanda de transporte aéreo de pasajeros alcance el 61% del nivel anterior a la pandemia. Cabe destacar que las pérdidas para 2021 se han revisado al alza respecto a los 47.700 millones previstos en abril. La IATA también ha revisado al alza las pérdidas para 2020, hasta los 137.700 millones de dólares desde los 126.400 millones.

¿Tiene sentido invertir en acciones de aerolíneas? A pesar de la mejora de las perspectivas de la IATA, compañías como American Airlines, Southwest y Spirit Airlines han experimentado recientemente una tendencia a la baja en el tráfico de pasajeros. Además, no olvidemos que se está produciendo una nueva crisis energética, que también afectará a los bolsillos de las compañías aéreas. En este contexto, nos abstendremos de hacer ningún gesto.