Evergrande, cuyas acciones no han cotizado en todo el mes de octubre, ha solicitado al operador del mercado chino la reanudación de la negociación de sus títulos a partir de este jueves.
El motivo de la suspensión, dictada el 4 de octubre, fue el principio de acuerdo por el que la compañía iba a llevar a cabo la venta de una participación mayoritaria en Evergrande Property Services a su rival Hopson Development Holdings, que también lleva sin cotizar desde entonces y que ha solicitado también volver a la cotización.
Evergrande ha informado en un comunicado remitido a la Bolsa de Hong Kong de que ha decidido rescindir y dar por terminado el acuerdo alcanzado con Hooplife Technology Group Limited, filial de Hopson Development Holdings Limited, para vender el 50,1% de Evergrande Property Services por 20.040 millones de yuanes (2.693 millones de euros).
Es por ello que considera que ya no tiene sentido seguir con la cotización suspendida.
"A solicitud de la compañía, se suspendió la negociación de las acciones en la Bolsa el 4 de octubre de 2021. La compañía ha presentado una solicitud para la reanudación de la negociación de las acciones a partir de las 9.00 del 21 de octubre de 2021", ha informado el gigante inmobiliario chino.
Necesidad de liquidez
Acuciado por problemas de solvencia por las dificultades de liquidez que atraviesa, Evergrande lleva semanas intentando la venta de varios activos.
Evergrande anunció el pasado 14 de septiembre la adopción de medidas para aliviar su delicada posición de liquidez, incluida la venta de participaciones accionariales y de otros activos.
Sin embargo, en referencia a la venta de Evergrande Property Services, la compañía señala que el pasado 12 de octubre "tenía motivos para creer (según información de diversas fuentes) que el comprador no había cumplido con el prerrequisito para hacer una oferta por Evergrande Property Services", por lo que Evergrande decidió ejercer su derecho de rescisión.
La versión de Hopson
De su lado, Hopson Development Holdings ha emitido un comunicado en el que sostiene su capacidad y preparación para llevar a cabo la transacción en las condiciones pactadas con Evergrande y en donde asegura que "no acepta que exista sustancia alguna para la rescisión", por lo que ha advertido de que se reserva todos los derechos legales.
"La junta lamenta anunciar que el vendedor no ha completado la venta de las acciones el 12 de octubre de 2021 de conformidad con los términos del acuerdo", recoge el comunicado de Hopson.
En este sentido, la empresa compradora afirma que el pasado 13 de octubre emitió un aviso para exigir al vendedor el cumplimiento de sus obligaciones de conformidad con el acuerdo alcanzado entre las partes, añadiendo que, ese mismo día, con posterioridad al aviso emitido, recibió la notificación por parte del vendedor declarando la rescisión o terminación del acuerdo.
Los problemas se acumulan
Evergrande impagó tres cupones de tres bonos diferentes que vencían la semana pasada y que suman 148 millones de dólares. El 29 de septiembre hizo lo mismo con unos intereses de 47,5 millones. Y el primero con el que no cumplió fue el 23 de septiembre por valor de 83,5 millones.
Según el memorando de adquisición de esos bonos, se concede un periodo de gracia de 30 días antes de considerar el default oficial, algo que vence este fin de semana.
Aunque el 29 de septiembre anunció la venta del 19,93% de las acciones del banco comercial Shengjing Bank –de su propiedad- a un conglomerado de propiedad estatal por 9.993 millones de yuanes (1.545 millones de dólares, 1.322 millones de euros), Shengjing Bank puso como condición para aprobar la operación que las ganancias netas que de ella obtenga Evergrande vayan a pagar las deudas que tiene con el banco. Así que no aumentó la tesorería de la compañía.
Mientras, el contagio a todo el sector continúa: hoy mismo Sinic ha declarado formalmente el incumplimiento de pagos y Kaisa es señalada por otro recorte de calificación crediticia. Ambas pertenecen al mismo sector inmobiliario que Evergrande.