Las bolsas europeas cambiaron de rumbo tras un primer intento de rebote para empezar la semana. A la espera de noticias de los bancos centrales, la cautela se impuso y las caídas tomaron la delantera. El Ibex 35 perdió fuerza paulatinamente hasta ceder un 0,45% para devolver su gráfica en los 8.322,7 puntos a pesar de haber intentado la reconquista de los 8.400 enteros a primera hora.

El primer día de la semana, la escasez de grandes referencias hizo que muchos inversores dirigiesen ya la mirada hacia próximas jornadas. En especial hacia la ronda de reuniones de bancos centrales, que tendrán que aportar más datos sobre sus recetas para combatir la galopante inflación. El miércoles llega el turno para la Fed de EEUU y un día después para el BCE.

Con este panorama, fueron los valores vinculados al turismo los que, una vez más, se llevaron la peor parte. IAG (-4,7%), Amadeus (-3,2%) y Meliá Hotels (-3%) terminaron como los más penalizados del parqué. Después, las socimis Merlin Properties (-2,7%) y Colonial (-2,3%).

La farmacéutica PharmaMar retroció un 0,04% al cierre a pesar de que este lunes anunció nuevos avances en el estudio de la lurbinectedina sobre el cáncer de pulmón microcítico. Un paso al frente que promete un nuevo campo de negocio para la compañía.

Uno de los valores más pujantes en la apertura, Acerinox, se tuvo que conformar al cierre con el séptimo puesto en el ranking de las mejores revalorizaciones. Y eso que la acerera recibió mejora de precio objetivo desde los 18,25 hasta los 20 euros por acción por parte de JP Morgan.

Más enérgicas fueron las subidas en Cellnex, líder de la tabla con avances del 2,4%, la farmacéutica Grifols (+1,7%) y Red Eléctrica (+1,2%). La siguiente en la lista fue Naturgy, que este lunes se convirtió en protagonista por haber cerrado la compra de varios activos de energías renovables de la también cotizada Ence (-1,2%).

Ya fuera del índice, sesión de altibajos para Duro Felguera. La industrial asturiana pasó de subir cerca de un 5% a terminar con descensos del 0,2% a pesar de sus pasos en su reestructuración financiera en virtud del rescate de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). La compañía ha revisado su plan estratégico conforme a su actual situación pero aún se le resiste el aplauso del mercado.

Con todo ello, el Ibex 35 volvió a alejarse un paso más de la reconquista de los 8.401 puntos, lo que habría supuesto un cierto cambio de aspecto técnico para una gráfica que este viernes debe enfrentarse a la cuádruple hora bruja más importante del año. En sentido opuesto, el soporte más considerable a salvaguardar se ubica en los 8.250 puntos, cada vez más cercanos.