Wall Street acaba la semana con sensibles pérdidas para sus principales índices. La sesión se queda huérfana de referencias macroeconómicas después de días de una intensa actividad en este ámbito y de digestión de decisiones sobre política monetaria de los grandes bancos centrales. Las gráficas se alejan de sus recientes máximos históricos.
Entre los inversores se impone el paso por caja con el objetivo de asegurar las ganancias conseguidas en sesiones previas. Además, aprovechando la agenda más tranquila de este viernes, los analistas repasan con atención los argumentarios de la Reserva Federal de EEUU (Fed), el Banco Central Europeo (BCE) y el resto de instituciones monetarias para justificar sus últimas decisiones.
Con este escenario, las pérdidas se imponen sin remedio en la Bolsa de Nueva York. Y con más fuerza que en las plazas europeas y asiáticas. El Dow Jones pierde un 1,6% hasta poner en apuros los 35.300 puntos. Un 1,4% pierde el S&P 500, que se esfuerza en conservar los 4.600 enteros. Por su parte, el Nasdaq se repliega un 1,2% y se descuelga por poco de los 15.000 puntos.
La jornada también ha venido marcada por ser la de vencimiento de opciones y futuros. Una circunstancia que suele ser sinónimo de mayor volatilidad y más brusquedad en los movimientos de los índices y de las cotizadas más proclives a experimentar fuertes saltos de valoración.
Mientras tanto, varios miembros de la Fed han concedido entrevistas en las últimas horas para explicar sus últimas medidas de tapering. La uniformidad de discurso entre ellos y su confianza en la capacidad de la institución para conjugar una sana inflación con un buen ritmo de expansión económica no ha sido suficiente para evitar las ventas en el parqué.
Acero y coches
Ya por el terreno corporativo, uno de los puntos calientes de la jornada lo aporta US Steel. La siderúrgica sufre descensos próximos al 4% después de haber anunciado una "reducción temporal" en el volumen de pedidos durante los últimos meses. Una circunstancia que choca con la tendencia vista anteriormente, con importantes cuellos de botella de suministro en el sector de las materias primas.
Este viernes también ha llegado la hora de que Rivian Automotive publicase sus primeras cuentas como cotizada. Con pérdidas de 1.200 millones de dólares en el último trimestre, la fabricante de coches eléctricos sufre un frenazo del 14% en su cotización.
Sector financiero
Por su parte, JP Morgan encaja con descensos del 3% el anuncio de una multa de 125 millones de dólares impuesta por la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) por no haber guardado registros de las comunicaciones con clientes de una de sus filiales durante casi dos años. La noticia impulsa la retirada de las posiciones más especulativas formuladas en sesiones previas.
Sin abandonar el sector bancario, Santander Consumer USA cotiza con descensos del 0,3% tras conocerse que la cabecera de la entidad en EEUU ha decidido ampliar una vez más el plazo de su opa por las acciones que aún no controla del cotizado. Esta vez, la prórroga para que los accionistas acepten la oferta de 41,5 dólares por título se alarga hasta el 23 de diciembre.