El feo giro en el precio de las acciones que vimos en la sesión de ayer de Repsol está teniendo su repercusión en el día de hoy, ya que es el valor que más baja de todo el selectivo español con una caída en estos momentos superior al 3% en los entornos de los 10,80 euros.
Y es que el precio de la acción se giraba ayer de manera muy brusca justo cuando alcanzaba la zona de resistencias del pasado mes de octubre en las inmediaciones de los 10,40 euros. Este nivel de precios es un nivel altamente conocido por parte de los inversores ya que prácticamente estuvo el precio detenido ante dicha resistencia intentando romperla al alza casi todos los días del mes de octubre pasado.
Por otra parte, la vela de ayer es una clara vela de giro en un día, es lo que los estadounidenses llaman "spike" y es la típica vela que se forma ante zonas de resistencias cuando el valor llega cargando sobre sus espaldas una importante revalorización y, por consiguiente, estando ya en zona de clara sobrecompra por oscilador tal y como podemos ver en el siguiente gráfico.
El problema que tenemos en la sesión de hoy es que la confirmación de dicho giro que debe hacerse en la sesión siguiente se está haciendo de manera contundente, y si bien es cierto que no hay mucho volumen de contratación, el que nos estemos alejando de manera tan rápida de la zona de resistencias no augura nada positivo.
Estamos hablando casi de una caída del 6% desde los máximos de la sesión de ayer y que está dejando a muchísimos inversores descolocados ya que pensaban que la evolución del precio de las acciones de Repsol solían moverse al unísono con las del precio del barril de petróleo.
Esa afirmación de cierta forma es correcta, pero no completa ya que debe contener muchos matices. No todo en Repsol es petróleo, también es gas natural. Y es precisamente éste último en el que estamos viendo caídas del más del 5% en la sesión de hoy en el precio del gas natural europeo.
Es curioso que con la tensión entre Rusia y Ucrania el precio del gas natural se relaje tanto, pero sin duda está provocando una recogida de beneficios en las acciones de Repsol justo en el momento técnico en el que es propicio.
A partir de ahí, cuanto menos debería alcanzar los 10,63 euros como nivel del 38,2% de retroceso de Fibonacci y con posibilidades de acabar viendo un 61,8% de todo el impulso previo desde mediados del pasado mes, lo que implicaría ver a la acción en los 10,15 euros.