Esta subida ha tenido dos tipos de movimientos claramente diferenciados. El primero de ellos muy explosivo como el que vivimos tras marcar mínimos en octubre de 2020 y otro igual de explosivo tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia mientras que la fase entre ambos periodos ha sido más bien determinada por un proceso de lateralidad a modo de consolidación de precios. 

[Consulte aquí las claves operativas del Ibex 35, según el analista Eduardo Bolinches]

La corrección que está sufriendo el precio de la acción de Repsol desde que se marcasen máximos históricos el pasado 9 de junio no es que sea muy importante, sobre todo si la comparamos con las ganancias previamente cosechadas. 

Sin embargo, lo que sí que es relevante es que, al contrario de como pasase en situaciones anteriores, ahora la media móvil de medio plazo se ha roto a la baja y en el proceso de recuperación, el precio no está pudiendo reconquistar dicho nivel de precios.

Y precisamente también lo que ocurrió lo mismo cuando el primer impulso explosivo llegó a su fin aunque luego con el proceso de lateralidad que vino después acabó siendo recuperado.

Evolución de las acciones de Repsol Eduardo Bolinches ProRealTime

Así que es momento de extremar las precauciones y si desea entrar en el valor parece que lo más sensato pasa por esperar a ver uno o dos cierres por encima de dicha media móvil que en estos momentos está pasando por los 14,40 euros para evitar el riesgo que implicaría una entrada precoz y posterior pérdida del soporte vital de los 13,30 euros. 

Más vale comprar un poco más caro que a los precios actuales sabiendo que el valor solo se ha tomado un pequeño descanso en el camino.