Los miedos a que tenga lugar una recesión económica han vuelto a Wall Street. Los principales índices de la Bolsa de Nueva York iniciaban la sesión con fuertes caídas, similares a las que sufrían las bolsas europeas.

El Dow Jones perdía un 1,51%, hasta los 30.628,18 puntos; mientras que el S&P 500 se dejaba un 1,59%; hasta los 3.764,52 enteros. El Nasdaq Composite bajaba un 1,71%, hasta los 10.937,78 puntos.

Solo tres valores del Dow Jones se libraban de los descensos. Merck sumaba un 0,50%; Walmart, un 0,15% y Amgen, un 0,09%. Por el contrario, las mayores caídas eran las de Boeing, que perdía un 4,14%; American Express, que cedía un 3,20% y Caterpillar, que recortaba un 3,14%.

Así abre Wall Street Eduardo Bolinches

El miedo vuelve a lastrar a la renta variable. Los mercados vuelven a sopesar en qué grado afectará a la economía el endurecimiento de la política de los bancos centrales para luchar contra la inflación.

En el caso de EEUU, los inversores esperan ahora que el incremento que la Reserva Federal (Fed) incremente los tipos de interés en otros 75 puntos básicos en su reunión de julio. El banco central estadounidense ya subió sus tasas en dicha proporción en su cita de junio.

Curva

Las caídas se extendían por Wall Street en su regreso a la actividad, después de que el lunes el parqué neoyorquino permaneciese cerrado por la celebración del Día de la Independencia. De esta forma, queda sin efecto la pequeña tregua que se vivió el viernes.

Fruto de esa preocupación por la situación económica, la curva de tipos de EEUU se ha invertido en alguno de sus tramos. La diferencia de rentabilidad entre los bonos estadounidenses a dos y 10 años ha llegado a invertirse, aunque solo brevemente, por primera vez desde mediados de junio.

La inversión de la curva de tipos es considerada para muchos analistas como una señal de que en los próximos 12 o 18 meses la economía estadounidense entrará en recesión. El interés del bono de EEUU a 10 años alcanzó el 1,978%.

Al otro lado del Atlántico, la atención se centra ya en las actas de la última reunión de la Fed, que se publicarán el miércoles. El jueves se conocerá el resultado de la encuesta ADP de empleo del sector privado. El consenso de analistas espera que en junio EEUU crease 200.000 nuevos puestos de trabajo.



Un día después, el viernes, se conocerán los datos oficiales. El mercado prevé una ligera desaceleración en la creación de empleo, hasta las 295.000 nóminas no agrícolas. Además, se estima que la tasa de desempleo se mantenga en un 3,6 % de la población activa.