El Ibex 35 ha cerrado su octava sesión consecutiva de subidas. Ayer cerró en los 8.352 puntos y hoy lo ha hecho en los 8.380, lo que implica una ganancia del 0,33%. Su objetivo pasa por consolidar los 8.400 en su escalada hacia los 8.500 enteros. En lo que va de año, su pérdida se reduce al -3,83%.
Los títulos que componen el selectivo español prácticamente han quedado en tablas por número de valores en verde y en rojo. Repsol, Solaria y Cellnex han tirado del carro. Sus acciones se han revalorizado un 2,16%, un 1,75% y un 1,56%, respectivamente.
Por el contrario, Amadeus e Indra han destacado a la baja, con pérdidas del -2,02% y del -1,55%.
Tras un primer semestre de abultadas caídas, las grandes bolsas están luchando contra su propia historia y remontando en plena temporada vacacional, cuando estadísticamente en la mayoría de los veranos han acabado cediendo por la falta de volumen y la mayor volatilidad en los mercados financieros.
El menor dato de inflación que se conoció ayer en Estados Unidos -8,5% interanual, frente al 9,1% anterior- debería desatar aún más su rally estival en lo que podría ser un punto de inflexión macroeconómico con los precios de la energía moderándose.
En Europa, el principal selectivo del Viejo Continente, el EuroStoxx 50, ha subido un 0,21% tras muchas dudas: empezó con fuerza, luego se fue a terreno negativo y al final ha acabado en verde pidiendo la campana. El CAC 40 galo y el DAX germano han sido la cara y la cruz: el primero ha ganado un 0,33% pero el segundo ha perdido un ligero -0,05%.