El mal comportamiento que los mercados registraron en el primer semestre del año ha hecho mella en las cuentas del Fondo de Pensiones de Noruega. El vehículo inversor registró unas pérdidas récord de 1,68 billones de coronas noruegas, unos 170.410 millones de euros, en la primera parte del ejercicio.
Según el balance presentado este miércoles, la guerra de Ucrania, la inflación y la subida de tipos de interés fueron las principales causas del resultado negativo del considerado como el mayor fondo soberano del mundo.
Su apuesta por las acciones, que representa el 68,5% del total de la cartera, se saldó en el primer semestre con una rentabilidad negativa del 17%.
Caídas de la tecnología
En ese mal desempeño mucho tuvo que ver el fuerte descenso de sus inversiones en el sector tecnológico, que llegó al 28%. Apple, Microsoft o Alphabet eran, a cierre de junio, las principales posiciones del fondo.
"El mercado se ha caracterizado por el aumento de las tasas de interés, la alta inflación y la guerra en Europa", ha declarado el consejero delegado de Norges Bank Investment Management (NBIM), Nicolai Tangen.
Tangen también ha señalado que las inversiones en acciones tecnológicas "se han comportado particularmente mal", en un contexto en el que prácticamente los sectores tuvieron rentabilidades negativas.
El único sector que se salvó de las caídas fue el energético. Las acciones de las compañías englobadas en él se revalorizaron de media un 13% gracias a la subida de los precios del petróleo, el gas y los productos refinados.
Rentabilidad negativa de la deuda
La partida correspondiente a deuda tampoco se libró de las rentabilidades negativas. Con un peso del 28,3% en la cartera, el descenso medio en el primer semestre alcanzó el 9,3%.
En este ámbito, las principales inversiones fueron los bonos públicos estadounidenses, japoneses y alemanes. La deuda pública española ocupó el décimo lugar, con 40.276 millones de coronas noruegas (cerca de 4.090 millones de euros).
[¿Cómo invierten los mayores fondos soberanos del mundo?]
Como consecuencia de la mala evolución de los mercados, el fondo cerró el primer semestre del año con un valor de 11,65 billones de coronas noruegas o 1,18 billones de euros.
A finales de febrero, el fondo anunció que congelaría y se desharía posteriormente de sus activos en Rusia por el conflicto bélico en Ucrania, una cartera con un valor estimado entonces de unos 27.000 millones de coronas noruegas (2.738 millones de euros).