Desde Europa a Estados Unidos, las principales bolsas del mundo sufrían descensos en la jornada en la que comenzaba la reunión de la Reserva Federal (Fed). Ya está todo listo, por tanto, para que el miércoles se conozca en qué proporción eleva los tipos de interés la institución presidida por Jerome Powell.
A la espera del mencionado incremento, los principales índices de Wall Street iniciaban el día en negativo. El Dow Jones perdía un 0,88% y se situaba en los 30.752,36 enteros.
Solo una compañía del selectivo lograba esquivar las caídas. Se trataba de Boeing, que sumaba un 0,37%. Por el contrario, los mayores descensos eran los de Nike (3,15%), Verizon (1,56%) y Dow (1,52%).
Así abre Wall Street
A la vez, el descenso del S&P 500 llegaba al 1,02% y el índice caía hasta los 3.859,67 enteros. La pérdida del Nasdaq era del 0,99%, hasta los 11.422,16 puntos.
Los principales índices de la Bolsa de Nueva York lograron cerrar la sesión del lunes en 'verde'. El Dow Jones subió un 0,64%; el S&P 500, un 0,69% y el Nasdaq, un 0,76%, a pesar de que los volúmenes de contratación fueron reducidos.
El parqué neoyorquino frenó las últimas caídas sufridas. La semana pasada, el S&P y el Nasdaq registraron sus mayores descensos semanales desde junio, alarmados por la trayectoria de la economía estadounidense.
La volatilidad en el mercado de valores estadounidense ha empujado a muchos inversores a buscar refugio en los bonos del Tesoro, cuyo rendimiento se ha disparado a máximos no vistos en más de una década.
El interés de la deuda de Estados Unidos a 10 años se mantenía por encima del 3,5%, niveles no vistos desde 2011. De la misma forma, la rentabilidad del bono a 2 años acariciaba el 4%, máximos de 2007.
Analistas e inversores esperan que el incremento de los tipos de interés sea de 75 puntos básicos, aunque el mercado valora con una probabilidad del 17% que el alza sea de un punto porcentual.
Los expertos de Generali Investments esperan que la subida sea de tres cuartos de punto, pero ven "un riesgo significativo de que la Fed sea más audaz y suba los tipos un punto porcentual completo".
Esperan un ritmo algo más lento de endurecimiento, con un incremento de 50 puntos básicos en noviembre y una última subida de 25 puntos básicos en diciembre, con riesgos inclinados al alza. “La Fed mantendrá entonces el tipo de interés oficial en el 4% hasta principios de 2024”, explican.
Más allá de la subida de tipos, el banco central estadounidense modificará sus previsiones económicas, que deberían indicar que la lucha contra la inflación será más dolorosa de lo que se había previsto.
Los expertos esperan que la inflación descienda más rápidamente el próximo año, pero por el momento, es poco probable que el presidente de la Fed, Jerome Powell, modifique su postura de halcón.
Del mismo modo, las previsiones apuntan a que el banco central estadounidense rebaje sus estimaciones sobre el producto interior bruto (PIB) de Estados Unidos para 2023 y 2024. Por el contrario, se espera que eleve el techo de los tipos de interés hasta el rango de entre el 4% y el 4,5%, desde la banda actual de entre el 3,75% y el 4%.
En la actualidad, y después de que la Fed los haya elevado 225 puntos básicos en cuatro reuniones, los tipos de interés se encuentran en rango de entre el 2,25% al 2,5%.
Desde enero y hasta la jornada previa a la subida de tipos del banco central estadounidense, el descenso acumulado por el Dow Jones ha superado el 14,5%. La caída del S&P 500 en el mismo plazo ha llegado al 18%; mientras que la del Nasdaq ha rebasado el 26%.
Aunque todavía faltan meses para que termine el año, estás son las caídas más abultadas desde 2008.