Wall Street iniciaba una nueva semana con tendencia mixta. Las dudas de los inversores se mantenían en los primeros compases de la sesión del lunes, ante el recrudecimiento de la guerra en Ucrania y los descensos de los fabricantes de microchips.
El Dow Jones subía un 0,53%, hasta los 29.453,41 puntos y el S&P 500, un 0,32%, hasta los 3.651,13 puntos; mientras el Nasdaq se dejaba un 0,16%, hasta los 10.633,86 enteros.
El sector farmacéutico encabezaba las ganancias del Dow Jones: Merck sumaba un 4% y Walgreens Boots, un 3,46%. Por el contrario, las mayores pérdidas eran las de Walt Disney (-1,06%), Microsoft (-1,02%) y Home Depot (-0,99%).
Así abre Wall Street
La medida de la administración Biden de impedir a las empresas o individuos chinos comprar algunos semiconductores y materiales de fabricación estadounidense, lastraba la cotización de estas compañías. Intel, Nvidia, Qualcomm, Micron Technology y AMD caían entre un 0,2% y un 1,2%.
En concreto, la orden impedirá a compañías o individuos chinos acceder a microchips o componentes fabricados en Estados Unidos, lo que limitará su capacidad para fabricar piezas necesarias para el funcionamiento de superordenadores o sistemas militares avanzados.
[El mercado bajista en Wall Street no ha terminado]
La medida es similar a las restricciones impuestas a la compañía china Huawei por la Administración del anterior presidente estadounidense, Donald Trump, que tuvo lugar entre 2017 y 2021.
Wall Street también se veía afectado por la escalada de las tensiones geopolíticas. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha amenazado con una "dura respuesta" contra Ucrania si "continúa con sus actos de terrorismo".
Lo ha hecho después de que el Ejército ruso haya llevado a cabo un "ataque masivo" contra la capital ucraniana, Kiev, y otras ciudades tras la explosión registrada el sábado en el puente de Kerch, que conecta el país con la península de Crimea, anexionada en 2014.
La apertura con tendencia mixta de este lunes tenía lugar después de las fuertes caídas del viernes. Detrás de estas caídas se encuentran los datos de paro de Estados Unidos. El desempleo bajó en septiembre hasta los 5,8 millones, un dato que sitúa la tasa de paro en el 3,5%, dos décimas menos que en agosto.
Inflación y resultados
A pesar de que la creación de empleo se ralentizó en septiembre, con 263.000 nuevos puestos de trabajo, el mercado laboral estadounidense siguió dando muestras de fortaleza. Los inversores esperaban ya el dato de inflación de septiembre, que se conocerá el próximo jueves.
El consenso de mercado espera que la tasa anual de la inflación en Estados Unidos se modere dos décimas, hasta situarse en un 8,1%, después de que la Reserva Federal (Fed) aumentase los tipos de interés 75 putos básicos, hasta el rango de entre el 3% y el 3,25%, y comunicase mayores subidas en el futuro.
Los inversores dan una posibilidad del 89% a una nueva subida de tipos de 75 puntos básicos cuando el banco central estadounidense se reúna en noviembre.
Esta semana Wall Street también se enfrentara a la prueba de los resultados empresariales. Este viernes publicarán sus cuentas algunos de los grandes bancos estadounidenses, como JPMorgan, Citi, Wells Fargo y Morgan Stanley.
"El consenso espera un crecimiento del 3% del beneficio por acción anual, un crecimiento de las ventas del 13% y una contracción del margen de 75 puntos básicos hasta el 11,8%", señalan los analistas de Goldman Sachs en una nota. "Excluyendo energía, se espera que el beneficio por acción caiga un 3% y que los márgenes se contraigan 132 puntos básicos", añaden.