El Ibex 35 ha echado el freno en la sesión de este miércoles, una jornada que ha terminado con un avance del 0,07% con el que se ha situado en los 8.331 puntos. La atención de los inversores se ha centrado en la salud de la economía antes de que se conozcan, ya con las bolsas europeas cerradas, las actas de la última reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed).

La pausa del Ibex 35 tiene lugar después de subir un 1,67% en la jornada del martes, un avance con el que el índice nacional recuperó el nivel de los 8.300 puntos y volvió a niveles de mediados del pasado agosto. Lo logró gracias al empuje de los bancos y de Repsol.

Los analistas de Link Securities destacan "la buena acogida por parte de los inversores del acuerdo alcanzado entre el Gobierno y los bancos para la protección de las hipotecas más vulnerables, aunque todavía quedan flecos para que éste sea aceptado por todas las entidades".

[Consulte aquí las claves operativas del Ibex 35, según el analista Eduardo Bolinches]

En este sentido, señalan que "es posible que el mercado esperara que no hubiera acuerdo y que el Gobierno impusiese el tema sin tratarlo con el sector. El hecho de que la banca haya participado en el acuerdo creemos que es lo que han celebrado con alivio los inversores".

Las acciones de Rovi han liderado las pérdidas del Ibex 35 tras anunciar que elevará sus ingresos operativos entre un 5% y un 10% el próximo año respecto a los logrados en 2021.

No obstante, la tasa de crecimiento de los ingresos operativos de 2023 registrará una disminución en la banda baja de la segunda decena respecto a 2022.

La caída de Endesa ha superado el 5%. La compañía prevé el reparto de hasta 5.390 millones de euros en dividendos entre sus accionistas en el periodo 2022-2025, ya que el grupo extenderá su política de un 'pay out' al 70% al último ejercicio del periodo.

La energética, que ha actualiza su estrategia para el trienio 2023-2025, ha revisado su estimación de resultado ordinario neto para este 2022, que era de 1.800 millones de euros, y ahora la eleva a unos 2.200-2.300 millones de euros, hasta casi un 28% más.

Por el contrario, las mayores subidas han sido las de Grifols, Inditex o Banco Sabadell.

La mayoría de bolsas europeas han terminado el día al alza tras conocerse que la contracción de la actividad del sector privado de la zona euro se ha suavizado en noviembre, según la lectura preliminar del índice de gestores de compra (PMI), elaborado por S&P Global Market Intelligence.

No obstante, a pesar de frenar su caída, el PMI de la zona euro acumula cinco meses consecutivos por debajo del umbral de los 50 puntos, que separa el crecimiento de la actividad de la contracción.

En el caso del PMI del sector servicios, el dato de noviembre se ha situado en 48,6 puntos, repitiendo el nivel del mes anterior, mientras que el PMI manufacturero subió a 47,3 enteros desde los 46,4 de octubre.

Los principales índices de Wall Street también registraban avances en una jornada cargada de referencias económicas.

Antes del toque de campana en Nueva York se ha conocido que el índice PMI compuesto de Estados Unidos ha caído en noviembre hasta los 46,3 puntos desde los 48,2 puntos de septiembre. Los analistas esperaban una lectura de 50 puntos, justo el nivel que separa la contracción del crecimiento.

Por su parte, los pedidos de bienes duraderos crecieron en octubre el 1%, siete décimas más que en el mes anterior. La cifra, además, ha superado las expectativas de los analistas, que esperaban una subida del 0,4%.

Por otro lado, las solicitudes de subsidio por desempleo aumentaron la semana pasada en Estados Unidos en 17.000, hasta 240.000 solicitudes, más de lo previsto. Inferior a la esperada ha sido la caída de la confianza del consumidor estadounidense en noviembre, mientras que las ventas de casas nuevas subieron en octubre frente a la caída prevista por los analistas.

[La España que proyecta Credit Suisse en 2023: inflación del 4,6%, Feijóo presidente y un Ibex 35 muy flojo]

Antes del inicio de la jornada en Europa, el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda elevó, por novena vez consecutiva desde octubre de 2021, los tipos de interés desde el 3,5% al 4,25%, situando la tasa se situó en su mayor nivel desde diciembre de 2008.

El incremento, de 75 puntos básicos, según explicó la institución en un comunicado, tiene el objetivo de combatir la alta inflación y la escasez de trabajadores que azota al país oceánico.

La subida de tipos en Nueva Zelanda ha tenido lugar en una jornada en la que, ya con las bolsas europeas, se publicarán las actas de la reunión de octubre del Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed (FOMC), unos documentos en los que los inversores buscarán más información sobre lo que pretende hacer en materia de política monetaria el banco central estadounidense.

El mercado descuenta un incremento de 50 puntos básicos en la cita de diciembre y un aumento de 50 o 75 puntos básicos a lo largo del primer trimestre del 2023, hasta alcanzar un nivel máximo del 5%. Asimismo, espera que los recortes se inicien a finales de 2023.

[Los fondos soberanos premian a EEUU e India en lugar de a Reino Unido y China]

La expectativa de que la Fed opte a partir de ahora por menores subidas de los tipos, después de las repetidas alzas que ha aprobado para tratar de combatir la inflación hizo que Wall Street cerrase el martes al alza. El Dow Jones sumó un 1,18%; el S&P 500 ganó un 1,36%, lo mismo que el Nasdaq.



El petróleo Brent cedía un 4,12%, hasta los 84,7 dólares por barril. El descenso coincidía con las discusiones del G7 para limitar el precio del petróleo ruso transportado por vía marítima. Las principales economías del mundo barajan un tope de entre 65 y 75 dólares por barril.

[Consulte aquí las claves operativas del Ibex 35, según el analista Eduardo Bolinches]

Así lo ha publicado Reuters, que cita una fuente diplomática de la Unión Europea (UE). Representantes de los 27 países del bloque estaban discutiendo la mencionada propuesta con el objetivo de alcanzar un acuerdo al final de día.



El grupo de las siete principales economías del mundo tiene previsto aplicar el tope de precios a las exportaciones marítimas de petróleo ruso el 5 de diciembre, como parte de las sanciones destinadas a castigar a Moscú por su invasión de Ucrania.

El euro se fortalecía frente al dólar y se cambia a 1,031 ‘billetes verdes’.

La rentabilidad del bono español a 10 años bajaba hasta el 2,88%; mientras que la prima de riesgo se reducía hasta los 95,7puntos básicos.