La narrativa de lo ocurrido el año pasado es que la Reserva Federal ha mantenido las tasas de interés demasiado bajas durante demasiado tiempo, lo que ha provocado una inflación galopante.
Este hecho es aparentemente incuestionable, pero sin embargo es una invención total. Durante la crisis del año 2008, la Reserva Federal redujo las tasas de interés desde el 5,25% al 0% y las mantuvo en el 0% durante siete años.
En marzo de 2020, la Fed rebajó los tipos de interés un 1,5% hasta el 0% y los mantuvo así durante dos años para posteriormente elevarlos hasta el 4,5%, que es tres veces el nivel previo que teníamos en la pandemia.
[Consulte aquí las claves operativas del Ibex 35, según el analista Eduardo Bolinches]
Entonces, si las tasas de interés estaban causando inflación, ¿por qué la inflación no ha vuelto al nivel previo a la pandemia?
Porque sólo han reducido su balance general en una pequeñísima cantidad en relación con lo creado.
Este enorme error de política monetaria ha provocado que los mercados permanezcan tranquilos a pesar de que nos encontremos en un final de ciclo, escenario que nunca había sucedido nunca antes en la historia de los mercados de valores.
Por lo general, la perspectiva de aumentos de tasas y de una recesión provocan que los mercados eliminen el riesgo y el apalancamiento, pero esta vez no está ocurriendo.
Tal y como podemos ver en el gráfico anterior, cada vez que el Baltic Dry Index se coloca en los niveles de precio a los que ya se encuentra, el mercado de valores lo tomaba muy en cuenta reaccionando con caídas. Sin embargo, ahora no está ocurriendo lo mismo.
A lo largo del año pasado, los inversores han estado comprando continuamente en todas y cada una de las caídas para adelantarse a lo que esperan que será un nuevo rescate del mercado de valores.
[La cartera de acciones de Eduardo Bolinches para la sesión de hoy]
Sin embargo, la ironía es que ellos son precisamente la razón por la cual la Reserva Federal estadounidense no puede dejar de subir las tasas de interés.
Los inversores han creado su propia ilusión de solvencia que ahora está totalmente divorciada de la economía. De hecho, el increíble dato de empleo del viernes ha hecho que el mercado de bonos descuente claramente el precio del dinero en el 5% para mayo.