Wall Street iniciaba la sesión del miércoles en positivo. El Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq subían a la espera de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) eleve los tipos de interés 25 puntos básicos y de que el banco central estadounidense dé alguna indicación sobre si será el último incremento de este ciclo.

Desde que comenzó a elevar las tasas de referencia en marzo de 2022, la institución presidida por Jerome Powell ha elevado el precio del dinero en nueve reuniones consecutivas. El incremento conjunto es de 475 puntos básicos, hasta situar los tipos de referencia en el rango de entre el 4,75% y el 5%.

Con la atención en el banco central estadounidense, el Dow Jones subía un 0,12%, hasta los 33.721,85 puntos; el S&P 500 avanzaba un 0,37%, hasta los 4.134,52 puntos, y el Nasdaq, un 0,58%, hasta los 12.150,13 enteros.

Así abre Wall Street Eduardo Bolinches

Antes de la apertura de la sesión se ha conocido que el sector privado estadounidense, según el procesador de nóminas ADP, creó 296.000 nuevos puestos de trabajo en abril, superando las previsiones de los analistas.

Las cifras ADP siguen a la Encuesta sobre vacantes y rotación laboral (JOLTS) elaborada por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), que se conoció el martes. Según dicha encuesta, las ofertas de empleo cayeron en marzo a un mínimo de casi dos años, a 9,6 millones. La cifra estuvo por debajo de lo esperado por los analistas. El viernes se publicarán los datos de empleo oficiales.

Los inversores también esperaban que el Institute for Supply Management publicase su PMI no manufacturero. Es probable que suba hasta 51,8 en abril, frente a 51,2 en marzo. S&P Global también publicará el PMI compuesto y de servicios de abril.

Además de a la situación económica de la primera potencia del mundo, los inversores esperaban novedades en torno a la negociación del techo de deuda de Estados Unidos.

[Yellen advierte de que Estados Unidos podría caer en un impago de la deuda el próximo 1 de junio]

La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, avisó este lunes de que el país podría incurrir en un impago de la deuda nacional el 1 de junio y urgió al Congreso a aprobar lo antes posible una suspensión del techo de endeudamiento.

En una carta al presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy, la secretaria del Tesoro estimó que el Ejecutivo dejará de poder cumplir sus obligaciones gubernamentales "a principios de junio, potencialmente el 1 de junio, si el Congreso no eleva o suspende el límite de deuda antes de entonces".

El actual techo de deuda es de 31,4 billones de dólares y se alcanzó el 19 de enero. Ese mismo día el Tesoro activó "medidas extraordinarias" para pagar las cuentas, pero ya entonces se subrayó que el uso de esas herramientas financieras especiales se extendía solo hasta el 5 de junio.

La Cámara de Representantes, de mayoría republicana, aprobó el 26 de abril un proyecto de ley para subir el techo de deuda a cambio de amplios recortes del gasto público, pero esa iniciativa tiene pocos visos de prosperar porque los demócratas son mayoría en el Senado y la Casa Blanca ha avisado de que el presidente, Joe Biden, lo vetará si llega a su despacho.

Bancos regionales

La debilidad de los bancos regionales estadounidense continuaba este miércoles, de que el martes las acciones de PacWest se hundieran un 28%. Los títulos de Metropolitan Bank cayeron un 20% y los de Western Alliance, un 15%.

La sangría se frenaba tras la apertura de la sesión de este miércoles y las acciones de PacWest repuntaban un 9%. Las de Metropolitan Bank subían un 11% y las de Western Alliance, un 4,14%.

Comerica y Zions Bancorp subían un 1,1% y un 3,5%, respectivamente. PNC Financial Services Group avanzaba un 0,75%. La entidad financiera dijo el martes que la empresa matriz y su filial bancaria podrían ofrecer hasta 15.000 millones de dólares de sus títulos de deuda para proporcionar liquidez adicional.

Las turbulencias del sector se reavivaron la semana pasada a consecuencia de la debilidad mostrada por First Republic Bank. En la madrugada del pasado lunes, y tras un fin de semana de especulaciones, los reguladores de Estados Unidos intervinieron la entidad y llegaron a un acuerdo para vender la mayor parte de sus operaciones a JPMorgan por 10.600 millones de dólares (9.664 millones de euros).

El de First Republic es cuarto colapso de un banco regional en apenas dos meses en Estados Unidos después de los de Silicon Valley Bank, Signature Bank y Silvergate Bank el pasado marzo.

La entidad se había hundido en bolsa y había perdido prácticamente todo su valor la semana pasada, cuando divulgó sus resultados trimestrales y reveló que sus clientes habían sacado más de 100.000 millones de dólares en depósitos durante la reciente crisis bancaria.

[La crisis bancaria de EEUU no ha terminado: el mercado apunta ahora a PacWest]

Fruto de las diferentes quiebras, el índice KBW de banca regional cerró el martes en su nivel más bajo desde diciembre de 2020. Este miércoles repuntaba un 0,73%.

"Aumenta la ola de preocupación por la mala salud de las carteras de los bancos regionales de Estados Unidos, con muchos sentados sobre grandes pérdidas no realizadas, en un momento en que la fuga de depósitos está en auge", dijo Susannah Streeter, jefa de mercados monetarios de Hargreaves Lansdown, tal y como recoge Reuters.

Resultados

Antes de que diese inicio la jornada al otro lado del Atlántico, varias compañías han presentado sus resultados. 

Ford tuvo unos beneficios netos de 1.757 millones de dólares (1.597 millones de euros) el primer trimestre de 2023, tras perder 3.110 millones de dólares en el mismo periodo de 2022, gracias a un fuerte aumento de los ingresos.

Kraft Heinz ganó 836 millones de dólares (761 millones de euros) en el primer trimestre del año, lo que supone un incremento del 7,7% respecto del resultado contabilizado un año antes por la multinacional, que ha revisado al alza sus pronósticos anuales.

AMD registró unas pérdidas netas de 139 millones de dólares (126 millones de euros) en el primer trimestre de 2023, concluido el 1 de abril, frente a las ganancias de 786 millones de dólares (712,2 millones de euros) del mismo periodo de un año antes.

Los analistas esperan que los beneficios trimestrales de las empresas del S&P 500 disminuyan un 1,4% con respecto al año anterior, según datos de Refinitiv, frente a la caída del 5,1% prevista a principios de abril.