El Tesoro Público ha colocado este martes 2.069,96 millones de euros en una subasta de deuda a corto plazo, en el rango medio previsto, y lo ha hecho remunerando a los inversores con intereses más elevados. En el caso de las letras a nueve meses, la rentabilidad ofrecida ha rozado el 3,5%.
En un momento en el que los inversores particulares están mostrando gran interés por la compra de este tipo de deuda dada su alta rentabilidad, la demanda en esta subasta ha superado los 5.343 millones de euros, más del doble de lo finalmente adjudicado.
Según los datos del Banco de España recogidos por Europa Press, el Tesoro ha colocado 529,74 millones de euros en letras a tres meses, frente a una demanda de 2.112,02 millones. El tipo de interés marginal se ha situado en el 3,263%, por encima del 3,090% de la subasta anterior de mayo, alcanzando su nivel más elevado desde noviembre de 2011.
En las letras a nueve meses, el Tesoro ha colocado 1.540,22 millones, por debajo de los 3.231,24 millones solicitados por los inversores. La rentabilidad marginal ha sido del 3,490%, por encima del 3,222% previo. Se trata del nivel más alto registrado, teniendo en cuenta que esta referencia se lanzó en febrero de 2013.
El mantenimiento de los elevados intereses ofrecidos, en línea con las últimas subidas de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE), ha mantenido el apetito inversor de los mercados por los títulos españoles, especialmente por la deuda a corto plazo.
Alta rentabilidad
La emisión se produce así en un momento en el que los inversores particulares están mostrando gran interés por la compra de deuda, principalmente a corto plazo, dada su alta rentabilidad, que ha ido creciendo desde inicios de 2022.
Tras esta subasta, el Tesoro volverá a los mercados el próximo jueves día 15 con una subasta de bonos y obligaciones del Estado, con la que cerrará las emisiones del mes de junio. El organismo público espera colocar entre 4.500 millones y 5.500 millones de euros en las tres referencias que subastará.
Las subastas de este mes han estado marcadas por el lanzamiento de un nuevo bono sindicado a 10 años con vencimiento el 31 de octubre de 2033. El Tesoro emitió 13.000 millones en la subasta y recibió una demanda por encima de 85.133 millones de euros, una de las más altas registradas por el organismo en su historia.
El bono emitido el pasado miércoles vence el 31 de octubre de 2033 y tiene un cupón del 3,55%. La rentabilidad se ha situado en 3,556%, equivalente a 10 puntos básicos por encima de la actual referencia a 10 años, con vencimiento más corto en abril de 2033.
Vida y coste
Con estas últimas subastas, el organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ya ha emitido cerca de un 60% de su programa de financiación a medio y largo plazo para 2023.