El fenómeno de las acciones meme -que disparó la cotización de compañías estadounidenses con problemas económicos y que provocó la desaparición del fondo de cobertura Melvin Capital- no ha muerto. Así lo demuestra la fuerte subida en bolsa registrada por varias empresas, entre las que destaca Tupperware. Ahora, y tras haberse revalorizado un 768%, cae un 54%.
Esa fuerte subida del 768% tuvo lugar en sólo 10 sesiones bursátiles, las que se celebraron entre el 19 de julio y el 1 de agosto. Pasó de valer 40 millones de dólares en el parqué neoyorquino a tener una capitalización bursátil de 239 millones de dólares.
Los valores meme suelen ser empresas débiles, al borde de la quiebra, pero que llaman la atención de los inversores, quienes se ponen de acuerdo en foros de internet para hacer subir el precio de sus acciones.
El inicio de la 'mememanía'
La mememanía comenzó en la primavera de 2020 y cogió ritmo a principios de 2021. En plena pandemia, miles de pequeños inversores se unieron en foros de Internet – especialmente en WallStreetBets, de Reddit- para impulsar la capitalización de pequeñas empresas cotizadas en el parqué neoyorquino.
Las redes sociales amplificaron este efecto y las acciones meme se dispararon sin ninguna razón empresarial que impulsara su precio. El caso más famoso fue el de la tienda de videojuegos GameStop, que llegó a subir un 870% en cinco días. Otra de estas empresas fue la cadena de salas de cine AMC.
Bed Bath & Beyond también formó parte de la locura de los memes, pero a diferencia de GameStop y AMC, y por ahora de Tupperware, acabó en bancarrota. Así se declaró el pasado abril, tras años de dificultades para cubrir deudas pendientes y financiar sus operaciones.
Así, la subida vertical de Tupperware ha tenido lugar a pesar de las distintas advertencias sobre su viabilidad que, desde el pasado abril, ha lanzado la propia empresa. Tanto es así que incluso habría contratado asesores financieros para explorar diferentes opciones para garantizar su supervivencia. Su deuda, como se supo entonces, ronda los 700 millones de dólares.
Problemas de Tupperware
A los problemas con su deuda se ha sumado la falta de información: la marca de tuppers no ha presentado ni los resultados completos de 2022 ni los de la primera parte de este ejercicio. Según las últimas cifras disponibles, las ventas de la compañía cayeron entre enero y septiembre del pasado año casi un 18%, ya por debajo de los 1.000 millones de dólares.
La mala situación del negocio de Tupperware se refleja en su cotización. Su cotización se hundió un 53% en 2021 y un 73% en 2022, tras haberse disparado un 277% en 2020, gracias al repunte de las ventas de utensilios de cocina que tuvo lugar durante el inicio de la pandemia.
Las bajadas continuaron durante la primera parte de 2023. Las caídas fueron tales que durante más de dos meses su valor se redujo por debajo del dólar por título, llegando a poner en peligro su continuidad como cotizada en la Bolsa de Nueva York. A pesar de la fuerte subida mencionada, el descenso acumulado en 2023 todavía es del 40,6%.
De hecho, desde que el 1 de agosto marcó máximos en los 5,91 dólares por acción, su cotización se ha reducido un 54%, hasta los 2,46 dólares.
El de Tupperware no es un caso aislado. Los datos de Vanda recogidos por Reuters revelan que las subidas de las últimas acciones memes son menos espectaculares que las registradas por los primeros integrantes de este fenómeno.
Por ejemplo, en su máximo de cierre el 27 de enero de 2021, el precio de las acciones de GameStop había registrado una ganancia en un mes de más del 1.600%. Los pequeños inversores llegaron a apostar 460 millones de dólares a favor de la cadena de tiendas de videojuegos.
Nuevas 'acciones meme'
Tupperware no es la única incorporación reciente a las acciones memes. Otro de los nuevos integrantes de este grupo de compañías son Yellow, empresa estadounidense de transportes, y American Superconductor, desarrollador, también estadounidense, de diversos sistemas de energía a través del uso de superconductores.
Y de la misma forma que Tupperware caen desde los máximos alcanzados hace unas semanas. Tras haberse disparado un 405% en sólo cinco sesiones, el valor de Yellow se ha reducido casi un 90% en dos semanas. Los movimientos de American Superconductor, aunque similares, son menos pronunciados.
No en vano, el proveedor de servicios logísticos por carretera, que llegó a ser dominante en Estados Unidos, presentó a principios de agosto una declaración de quiebra en virtud del Capítulo 11 ante el Tribunal de Bancarrotas de Estados Unidos del distrito de Delaware.