Wall Street sigue celebrando la bajada de la rentabilidad de la deuda estadounidense. El parqué neoyorquino se aproximaba a sumar su carta sesión consecutiva al alza, a la espera de que se publiquen este jueves los datos del IPC del mes de septiembre y tras conocerse las actas de la última reunión de la Reserva Federal (Fed). 

La referencia que sí se ha conocido antes del toque de campana ha sido la inflación mayorista. El índice de precios de producción (IPP) de Estados Unidos registró el pasado mes de septiembre un alza del 0,5% mensual, frente al incremento 0,7% del mes anterior.

El índice subyacente de inflación de la producción, que excluye el impacto de la energía y de los alimentos por la mayor volatilidad de sus precios, se mantuvo sin cambios en septiembre por segundo mes consecutivo con un incremento del 0,2%.

En datos interanuales, la cifra se situó un 2,2% por encima respecto de septiembre del año previo, mientras que la variable subyacente hizo lo propio en un 2,8%.

En los primeros minutos de negociación, el Dow Jones subía un 0,24%, hasta los 33.827,65 puntos; el S&P 500, un 0,38%, hasta los 4.374,67 puntos, y el Nasdaq, un 0,74%, hasta los 13.663,31 puntos. Tras conocerse las actas de la Fed, el Dow Jones se mantenía plano, mientras que los otros dos principales índices del mercado estadounidense conservaban las subidas.

Así abre Wall Street Eduardo Bolinches

Walgreens Boots (+3,3%), Amgen (+1,69%) y Boeing (+1,64%) lideraban las ganancias del Dow Jones; mientras que las mayores caídas eran las de Chevron (-2,32%), Coca-Cola (-1,18%) y J&J (-0,38%).



Los rendimientos de la deuda pública han bajado desde sus máximos de varios años gracias a los comentarios moderados de algunos miembros de la Fed. La rentabilidad del bono estadounidense a 10 años se moderaba al 4,6% en el arranque de la sesión de este miércoles.

Sin embargo, la gobernadora de la institución, Michelle Bowman, reiteró el miércoles su opinión de que, a pesar de "algunos avances" en materia de inflación, el banco central estadounidense probablemente tendrá que endurecer aún más la política monetaria para restablecer la estabilidad de precios.



El gobernador de la Fed, Christopher Waller, el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, y la presidenta de la Fed de Boston, Susan Collins tomarán la palabra a lo largo del día.

Actas de la Fed

Los inversores esperaban las actas de la reunión que en septiembre mantuvo el banco central estadounidense. En dicho encuentro, la institución presidida por Jerome Powell decidió mantener los tipos de interés en el rango de entre el 5,25% y el 5,5%, en máximos de los últimos 22 años.

A pesar de ello, la Fed dejó la puerta a un nuevo incremento antes de que termine el año y redujo los descensos proyectados para el próximo ejercicio a 50 puntos básicos. Ahora, las actas han mostrado la división que existe entre los miembros de la Reserva Federal sobre la evolución futura de la política monetaria.

Según la herramienta FedWatch de CME, el mercado da unas posibilidades del 88% y del 74%, respectivamente, a que la Fed no modificará los tipos de interés en las citas que mantendrá en noviembre y diciembre. Los inversores esperan que los recortes comiencen al inicio de 2024.

La atención del parqué neoyorquino también se fijaba sobre Oriente Próximo. Israel bombardeó Gaza durante la noche antes de un posible ataque terrestre contra el grupo islamista palestino Hamás.

[El precio del petróleo, pendiente de los movimientos de Irán en el estrecho de Ormuz tras el ataque a Israel]



Según el ejército israelí, el número de muertos ascendió a 1.200 y el de heridos a más de 2.700, mientras que los ataques de represalia contra el enclave bloqueado han causado 1.055 muertos y 5.184 heridos, según las autoridades palestinas.

Los precios del petróleo seguían retrocediendo. El Brent de referencia en Europa cedía un 0,87%, hasta los 86,91 dólares por barril, mientras que el West Texas estadounidense restaba un 1,04%, hasta los 85,11 dólares por barril.

Más allá de los tipos de interés y el conflicto entre Hamás e Israel, los inversores estaban atentos a la salida a bolsa de Birkenstock. La firma de sandalias ha fijado su precio de salida en 46 dólares por acción, lo que da a la compañía una valoración de unos 8.640 millones de dólares, por debajo de los 9.200 millones que buscaba la empresa.