El gasto derivado del pago de los intereses de la deuda pública española superará los 39.000 millones de euros en 2024, casi un 10% por encima de la cifra prevista para el presente ejercicio, impulsado por las subidas de los tipos de interés acometidas por el Banco Central Europeo (BCE).

Según el Plan Presupuestario que el Ejecutivo ha remitido a Bruselas, los pagos por intereses de la deuda alcanzarán el próximo año los 39.078 millones, un 9,9% más de lo calculado para 2023 (35.550 millones).

En relación con el tamaño de la economía española, los intereses repuntarán ligeramente en 2024, hasta el 2,5% del producto interior bruto (PIB), desde el 2,4% previsto para este año. En 2022 el gasto en intereses se situó en el 2,4% del PIB, tal y como informa Efe.

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"Para 2024 se prevé un aumento (del gasto en intereses) hasta el 2,5% del PIB como consecuencia de la progresiva traslación a la deuda pública española de los mayores tipos de interés del BCE", señala el Gobierno en el Plan Presupuestario.

El Ministerio de Asuntos Económicos anunció el lunes que el Tesoro Público reducirá en 5.000 millones de euros el volumen de financiación neta previsto para este año, con lo que las emisiones netas de deuda pública se quedarán en 65.000 millones.

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El ministerio atribuye este recorte a "la prudencia en las estimaciones" y al "dinamismo y mayor crecimiento de la economía española". Según Asuntos Económicos, pese a la fuerte subida de los tipos de interés por parte del BCE, los costes de financiación se mantienen "en niveles contenidos en términos históricos".

El departamento que dirige Calviño destaca que el coste del conjunto de la deuda se sitúa en el 2,06%, sólo 33 puntos básicos por encima del año pasado, a pesar de que el BCE ha subido los tipos en 450 puntos básicos.