La biofarmacéutica está en pleno proceso de venta de su filial china, y cada vez hay menos dudas de que la operación saldrá adelante. Sin embargo, no se espera que la venta genere el impacto que la compañía sugiere, es decir, recaudar 1.500 millones de dólares, seguir siendo al mismo tiempo un accionista importante de Shanghái Rass y anunciar todo antes de que termine el año.

Además, las perspectivas en cuanto a la caída de los tipos de interés, el aumento en los volúmenes de plasma recuperado y la reducción del costo medio por litro se suman a las mejoras en el control de costes. El año 2024 no será un ejercicio en el que habrá gastos extraordinarios significativos, y todo ello está beneficiando al precio de sus acciones.

[Consulte aquí las claves operativas del Ibex 35, según el analista Eduardo Bolinches]

En términos técnicos, al observar el gráfico de largo plazo, notaremos que el valor experimentó una importante depreciación cercana al 70%, considerando los máximos de junio de 2021 en 25,94 euros y los mínimos alcanzados en octubre de 2022 en 7,82 euros por acción.

Desde esos mínimos, el valor ha protagonizado una interesante recuperación, aunque no exenta de volatilidad y movimientos bruscos a la baja, como el ocurrido entre los meses de agosto y octubre de este año, donde, tras alcanzar los 13,75 euros, una caída lo devolvió nuevamente a los 10 euros.

Evolución de las acciones de Grifols Eduardo Bolinches ProRealTime

A partir de ahí, el valor ha logrado recuperarse de forma contundente que lo ha llevado a situarse claramente por encima de sus tres medias móviles más representativas: las de 50, 100 y 200 periodos. A corto plazo, Grifols ha alcanzado y superado una zona de resistencia (ahora convertida en soporte) situada en los 13,73 euros, generando nuevas alzas que deberían llevar sus acciones hacia la siguiente resistencia, ubicada cerca de los 15 euros.

Por lo tanto, el primer objetivo, que también funciona como resistencia está precisamente en esos 15 euros por acción. Al alcanzar este nivel, se posicionaría por encima del 38,20% de su corrección proporcional Fibonacci del último y extenso tramo de caídas iniciadas desde los 25,92 euros. Si además el valor logra situarse holgadamente por encima, se abriría un nuevo tramo alcista con objetivos mucho más ambiciosos.

[La cartera de acciones de Eduardo Bolinches para la sesión de hoy]

Considerando todo lo anterior, si poseemos acciones de Grifols en cartera, lo más coherente sería mantener, siempre y cuando no pierda el soporte ubicado en los 13,73 euros.

En caso de querer abrir posiciones alcistas con un control adecuado del riesgo, deberíamos esperar a cualquier retroceso hacia niveles de 14 euros para introducir una orden de compra con una orden de protección situada por debajo de los 13,70 euros. Si no se produce ese ajuste, cualquier cierre por encima de 15 euros nos daría igualmente esa señal de compra.