Laura Piedehierro Rubén Escudero

Puig ha protagonizado la mayor salida a bolsa del año en Europa y la mayor en España desde la de Aena. La firma de perfumes, moda y cosmética ha comenzado a cotizar este viernes con una subida que ha llegado a dispararse hasta el entorno del 8%, tocando los 26,5 euros por acción. Partía desde los 24,5 euros, la parte alta de la horquilla fijada en el folleto, lo que supone una capitalización bursátil de 13.920 millones.

Sin embargo, a medida que ha ido transcurriendo la sesión, todas sus ganancias se han ido borrando y ha terminado plana, en el 0%, en el mismo nivel al que comenzó. Incluso, por momentos ha llegado a estar por debajo, con ligeras pérdidas.

Las acciones de la compañía catalana han comenzado a cotizar en las Bolsas de Valores de Barcelona, Madrid, Bilbao y Valencia con la etiqueta de cotización Puig a través del Sistema de Interconexión Bursátil (Mercado Continuo). La tradicional ceremonia del toque de campana, que marca el inicio oficial de la sesión de negociación de la compañía en los mercados ha tenido lugar en la Bolsa de Barcelona.

Cabe recordar que la salida a bolsa de Puig se estructura en dos partes. La primera consiste en una ampliación de capital por valor de 1.250 millones de euros, y la segunda en una oferta pública de venta de acciones ya existentes por valor de 1.360 millones de euros.

Sin duda, su debut ha sido uno de los hitos más importantes del año en las bolsas. No en vano, se han negociado títulos de la compañía por valor de unos 616 millones de euros, unas cuatro veces más que las acciones de BBVA o Sabadell, los otros protagonistas de la jornada por sus negociaciones de fusión.

Tercera generación

Marc Puig, presidente ejecutivo de Puig, ha señalado instantes antes del toque de campana que, “respaldados por la confianza de los inversores en nuestra estrategia, continuaremos construyendo nuestro portfolio de marcas propias focalizándonos en ampliar nuestro liderazgo en productos de prestigio y fragancias de nicho, mientras invertimos en nuestros mercados principales y apoyamos nuestra expansión en geografías de alto potencial”.

Y ha remarcado que “el hito de hoy también es posible gracias al espíritu emprendedor de dos generaciones que nos precedieron y que se atrevieron a mirar más allá de nuestras fronteras cuando muy pocos lo hacían en su momento. Puedo imaginar el orgullo de quienes nos dejaron si pudieran ver la fortaleza con la que hemos mantenido nuestra unión y lo lejos que hemos llegado juntos”.

Captar 3.000 millones

El objetivo de la compañía era el de colocar alrededor de un 22% de la compañía por unos 3.000 millones de euros. Este importe convierte la salida a bolsa de Puig en la mayor de Europa en lo que va de 2024.

Dicho importe convierte la salida a bolsa de Puig en la mayor de Europa en lo que va de año. Supera lo captado por la farmacéutica suiza Galderma -de unos 2.050 millones de euros- y la de CVC Capital Partners, que debutó la semana pasada en el parqué de Ámsterdam para conseguir hasta 2.300 millones de euros. “Con Puig en España y Galderma en Suiza, estamos encantados de acoger en 2024 las dos mayores opv a nivel mundial en nuestras bolsas hasta la fecha”, ha resaltado Jos Dijsselhof, consejero delegado de SIX Group y presidente de BME.

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Asimismo, el de Puig será el mayor debut bursátil en el mercado español desde el que en 2015 protagonizó Aena. El Estado se embolsó entonces 4.262 millones de euros al listar el 49% del gestor aeroportuario.

Por otro lado, cabe recordar que la propietaria de firmas como Carolina Herrera o Paco Rabanne cuenta con dos tipos de acciones que no tienen los mismos derechos políticos.

Acciones A y B

Las acciones Clase A, que seguirá conservando la familia Puig, conceden el derecho a tener cinco votos en la junta de accionistas, mientras que las de Clase B –las emitidas en la salida a bolsa- tienen únicamente un derecho a voto.

En un primer momento, Puig había avanzado que la familia propietaria -con acciones A- retendría el 68% del capital y el 91,4% del total de los votos, lo que dejaba un espacio a los inversores -acciones B- del 32% como máximo para las acciones y del 8,6% para los derechos políticos.

Una tienda de Jean Paul Gaultier, en Tokio. iStock

Pero, dada la fuerte sobredemanda que en los prolegómenos ha registrado Puig por parte de inversores institucionales, finalmente, el clan familiar conservará el 71,7% de los derechos económicos de la sociedad y el 92,5% de sus derechos de voto.

En este sentido, la compañía ha señalado que la oferta ha sido sobresuscrita múltiples veces en todo el rango de precios, lo que demuestra "la importante demanda de inversores institucionales internacionales y nacionales".

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Uno de esos inversores institucionales es CriteriaCaixa. El holding que gestiona el patrimonio empresarial de la Fundación La Caixa, ha adquirido acciones de clase B representativas del 3,05% del capital social de la compañía.

Para ello, CriteriaCaixa ha comprometido una inversión de 425 millones de euros, en una operación que se enmarca en su política de inversión, que "selecciona empresas líderes en sectores altamente atractivos, con capacidad de crecimiento y generación de valor".

Dividendos

Aunque no se ha establecido una política de dividendos para su nueva etapa como cotizada, Puig ha repartido en los últimos 20 años el 40% de sus beneficios. Esto se conoce en la jerga financiera como un pay-out del 40%.

Si se toma como ejemplo el 2023, este pay-out supuso un pago de 186 millones de euros. En este sentido, Puig espera realizar su primera distribución de dividendos como empresa cotizada en 2025, tal y como refleja el folleto remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

"Oportunidad atractiva"

Con todo, la salida a bolsa de Puig no ha estado exenta de cierta controversia. El primero de ellos ha sido la diferencia de derechos políticos entre las acciones A y B.

Sin embargo, y según consideran en Freedom 24, la fortaleza de la familia fundadora en el accionariado “asegura la continuidad en la gestión, generando confianza para los inversores en la visión a largo plazo de la compañía, lo que también podría respaldar la acción después de su salida a bolsa”.

Nuevo logotipo de Puig.

Otro punto cuestionado ha sido la horquilla de precios fijada, entre los 22 y los 25,5 euros por acción. “A pesar de que algunos analistas perciben este rango de precio como ambicioso, apoyado sobre el atractivo actual de invertir en el sector del lujo, no deja de ser un reflejo de la confianza de la empresa en su patrimonio de marca, y en sus perspectivas de futuro”, consideran los mismos expertos.

En su opinión, la salida a bolsa de Puig “representa una oportunidad atractiva para los inversores, respaldada por su sólida posición en el mercado, por sus adquisiciones estratégicas y por su audaz estrategia de fijación de precios”.

Rumbo al Ibex 35

La valoración de 13.920 millones ha superado las expectativas de la compañía y “demuestran el gran interés de los inversores en comprar acciones de Puig, ya que están dispuestos a pagar un múltiplo mayor que los de sus competidores”, según resaltan desde XTB.

Para poner estas cifras en contexto, si Puig formara parte del Ibex 35 ya ocuparía decimoquinta posición por capitalización bursátil, lo que le dejaría en la mitad de la tabla del selectivo español.

Por ahora Puig no será integrante del índice, a pesar de que cumple perfectamente con el criterio de capitalización bursátil. El Comité Asesor Técnico del Ibex 35 podría incluir a la compañía en sus próximas reuniones, que se celebrarán en junio, septiembre y diciembre.

Para formar parte del Ibex 35 las compañías deben cumplir varios criterios, basados en la capitalización, pero también en la liquidez. Por un lado, la capitalización media de las acciones de la compañía debe ser superior al 0,30% de la capitalización media del índice durante el periodo de control, que tiene una duración de seis meses.

Y por el otro, el valor debe negociarse al menos en un tercio de las sesiones del periodo de control, si bien puede realizarse una excepción, pero sólo en el caso de que la compañía se encuentre entre las 20 mayores empresas por valor de mercado.