Poco se sabe todavía de la posible opa que la familia fundadora y Brookfield estudian lanzar sobre Grifols: ni el porcentaje necesario de aceptación ni el precio. A falta de esas dos claves, lo que sí se sabe es que el 50% de la compañía de hemoderivados está en manos de los principales accionistas y que los analistas advierten de que la oferta podría ser excesivamente baja.

Por ahora, el consejo de administración de Grifols ha acordado la creación de un comité, denominado comité de la transacción, para dar seguimiento a la posible opa de exclusión que llevarían a cabo conjuntamente los accionistas familiares y Brookfield.

Asimismo, la farmacéutica ha acordado dar acceso al fondo canadiense a determinada información bajo acuerdo de confidencialidad en el marco de los trabajos dirigidos a la eventual presentación de una oferta de adquisición por las acciones de la cotizada en el Ibex 35.

Principales accionistas

La familia Grifols y diversos directivos vinculados a la compañía controlan algo más del 31% del capital a través de diversas sociedades. El máximo accionista de la corporación es Deria (9,2%), seguido de Scranton (8,67%) -vehículo inversor de la familia y epicentro de los problemas de la farmacéutica-, Ponder Trade (7,1%) y Ralledor Holding (6,1%).

El 50% restante se encuentra en manos de otros inversores, entre los que se encuentran grandes gestoras y bancos de inversión como JPMorgan (4,7%), Capital Group (4,6%) y BlackRock (4,3%).

Esta misma semana JPMorgan ha elevado su inversión en el grupo catalán, hasta convertirse en el primer accionista no vinculado con la familia de la misma. Al calor de la posible operación, BlackRock, Jefferies y Melqart también han incrementado sus posiciones.

Los accionistas minoritarios, según informó Europa Press, representan un 5% del capital. Los pequeños inversores se han mostrado preocupados por el momento en el que se podría producir la posible opa:"con el valor ahora depreciado".

Cotización

Lo cierto es que desde que comenzó el año, las acciones de Grifols se han hundido un 41,3%. Si se toma como referencia el 9 de enero –momento en el que Gotham City Research publicó su primer informe- la caída es del 36,3%.

La posibilidad de una opa no ha tenido grandes efectos sobre Grifols: sus títulos suman un avance del 0,9% desde que el pasado 8 de julio se conoció la intención de los Grifols y Brookfield. Este comportamiento se explica por las bajadas registradas en las últimas cuatro sesiones, especialmente desde que Moody’s anunció que dejaba de calificar a la farmacéutica.

El precio, clave

Pese a que la familia controla un tercio del accionario, algunos analistas dudan de que la operación se termine llevando a cabo si el precio ofrecido no es suficientemente atractivo para el resto de inversores.

Los rumores del mercado apuntan a que Brookfield estaría pensando en ofrecer 10 euros por acción, tal y como destacan desde el departamento de análisis de Banco Sabadell. Al mismo tiempo, subrayan que la familia Grifols se movería más en el entorno de los 12 o 13 euros por acción.

Los analistas de Sabadell ven "complicado" que el fondo canadiense y los fundadores puedan plantear una oferta distinta para los dos tipos de acciones con los que cuenta la farmacéutica: del tipo A –con más derechos políticos y que cotizan en el Ibex 35- y del tipo B.

El motivo se debe a que, de acuerdo con los estatutos de Grifols, ambas acciones tendrían un tratamiento "similar", por lo que los analistas de Sabadell creen que una oferta diferente "afectaría a todos los aspectos económicos en un escenario de opa por el 100%".

Si finalmente, y tal y como anticipan los analistas de Sabadell, habrá una única oferta para los tipos de acciones, los precios planteados conllevarían, como es lógico, distintas valoraciones y distintas primas.

Así, si Brookfield se lleva el gato al agua y el precio es de 10 euros por acción, la operación valoraría a Grifols por debajo de los 6.900 millones de euros. En este caso, la prima –respecto al cierre de la sesión del 7 de julio- sería del 11,2% para los títulos A y del 55,3% para los B.

El rango inferior de la horquilla con la que supuestamente trabaja la familia -12 euros- implicaría una valoración de 8.250 millones de euros y una prima del 33,5% para las acciones A y del 86,4% para las B.

En el mejor de los escenarios con los que se especula, el de los 13 euros por acción, la valoración de Grifols rozaría los 9.000 millones. Dicho precio supone una prima del 44,6% y del 100%, respectivamente.

Qué dicen los analistas

Cualquiera de estas tres posibles ofertas está muy por debajo del precio objetivo que los analistas dan a la compañía de hemoderivados. Según la media recogida por Reuters, gestoras, bancos de inversión y sociedades de valores consideran que el precio justo de Grifols es de 16,8 euros por acción. Asimismo, la recomendación media es de comprar. 

En opinión de los analistas de XTB, Grifols "se encuentra en un momento crítico". "Tras un año turbulento marcado por acusaciones de fraude y un desplome en el precio de las acciones, la familia fundadora y el fondo de inversión Brookfield han propuesto una solución drástica: comprar la compañía y retirarla de la bolsa", explican.

En su opinión, "la decisión final sobre la opa dependerá de diversos factores, incluyendo la evaluación en curso de la empresa y las condiciones del mercado. La reacción inicial de los inversores ha sido cautelosa, con algunos preocupados por la valoración de la oferta y otros viéndola como una oportunidad para salir de una inversión problemática".