En términos generales las utilities, que suministran servicios básicos como electricidad, gas o agua suelen tener un comportamiento positivo en épocas de volatilidad. Además, los próximos recortes de tipos de los bancos centrales, podrían provocar una caída significativa en la rentabilidad de los bonos.
El reciente movimiento de compra de ENW nos parece un acierto, que además podría financiarse íntegramente en efectivo gracias a las reservas de cash y su margen de maniobra. Poco a poco se está involucrando en el desarrollo de los centros de datos en España y se encuentra en una posición de privilegio ante la transición energética.
A nivel técnico la compañía se encuentra cotizando muy cerca de sus máximos históricos. En los últimos días ha rebotado desde niveles de soporte clave en 11,70 euros por acción coincidente con el retroceso 38,2 de Fibonacci, lo cual podría suponer un impulso al alza importante permitiéndole romper la media móvil de las últimas 50 sesiones.
Con estas señales y un RSI que muestra niveles cercanos a sobreventa podríamos pensar que el siguiente objetivo de la empresa es volver a cotizar en 12,5 euros y que en caso de romper la figura de lateralidad existente desde el mes de abril, el siguiente objetivo sería alcanzar los 13,5 euros por acción.
***Manuel Pinto es analista de mercados.