En plena contienda electoral en EEUU, donde hoy se espera que 234 millones de estadounidenses ejerzan su derecho al voto, nuestro Ibex 35 muestra signos de indefinición. En la jornada precedente desplegó una vela bajista que, de confirmarse en la sesión de hoy, pondría en duda la continuación de las subidas observadas en las dos sesiones anteriores. Entre sus integrantes, destaca el comportamiento de las acciones de ArcelorMittal, que lideran los avances en los primeros momentos de la sesión.

En su último informe de resultados, la acerera reportó un beneficio neto que equivale a casi la mitad de lo obtenido en el ejercicio anterior. ArcelorMittal, uno de los mayores productores de acero del mundo, ha advertido que las actuales condiciones del mercado son "insostenibles" debido al exceso de producción en China y a su baja demanda interna, factores que están desplomando los precios del acero en los mercados globales.

Este exceso de producción china, en relación con su demanda interna, ha generado márgenes muy reducidos para el acero y una estrategia de exportaciones agresivas, haciendo que los precios, tanto en Europa como en EEUU, se sitúen por debajo del coste marginal.

Desde un punto de vista técnico, el gráfico de ArcelorMittal no ofrece señales alentadoras, al menos para el medio y largo plazo. Desde los máximos alcanzados en febrero, cuando el valor llegó a tocar los 26,71 euros en formato intradiario, se ha producido una intensa fase de ajuste que se extendió hasta el mes de agosto, momento en el que el valor cayó hasta los 18,45 euros.

Esta caída incrementó drásticamente los niveles de sobreventa de los títulos de ArcelorMittal, generando un fuerte rebote que ha llevado al valor a buscar el último nivel de retroceso proporcional de dicha caída, es decir, el 61,8% de corrección, deteniendo el avance alcista en torno a la zona de los 23,50 euros.

Tras lograr acercarse a dicho nivel, y si nos enfocamos a corto plazo, observamos que su comportamiento está siendo sumamente errático, cruzando repetidamente al alza y a la baja la media móvil de largo plazo y abriendo huecos en ambas direcciones, lo cual genera incertidumbre sobre los próximos movimientos.

Sin embargo, el aspecto clave en el gráfico del valor es su directriz bajista de largo plazo, que se extiende desde los máximos de febrero mencionados anteriormente y que actualmente pasa por la zona de los 23,30 euros por acción. En el momento en que ArcelorMittal logre superar esta línea de tendencia, su aspecto técnico mejorará significativamente.

De este modo, solo consideraríamos una entrada o apertura de posiciones largas (alcistas) si se producen dos cierres diarios consecutivos, o uno semanal, por encima de los 23,30 euros. En ese caso, podríamos introducir una orden de compra para aprovechar un posible cambio de tendencia.

Dado que la volatilidad es considerablemente alta, conviene establecer una orden de protección para limitar el riesgo, la cual se activaría si se produce un cierre del valor por debajo de los 23 euros.