En el artículo de esta semana centraremos nuestro análisis en Banco Santander, una de las acciones del Ibex 35 que mayor correlación tiene con el índice.
Como veíamos en nuestro último artículo de análisis sobre el selectivo, durante más de 10 años el escenario de Banco Santander también ha estado limitado al alza por una importante zona resistiva, en este caso de 6,27 euros. A mediados de 2016, después de apoyarse en 2,78 euros, el precio desarrollaba un movimiento de carácter alcista (señalado en azul en el gráfico 1). A pesar de que con dicho movimiento el título lograba una revalorización superior al 100%, la tendencia se mostraba incapaz de alcanzar la zona de 6,27 euros, frenándose a mediados de 2017 en el entorno de 5,8 euros.
En mayo de 2017 se producía un primer rechazo en 5,8 euros (marcado con un 1) que provocaba la ruptura de la directriz alcista, dando paso así a un movimiento de carácter neutral. En febrero de 2018 se producía un segundo intento fallido de superar la mencionada resistencia (marcado con un 2) que daba lugar a un movimiento -en principio lateral y posteriormente bajista-. De esta forma, a mediados de 2018 el precio perdía el soporte de 5 euros, base del trazado lateral, dando paso a un movimiento de carácter bajista (marcado en rojo en el primer gráfico) con la consecuente búsqueda de soportes en los 3,8 euros y los 2,8 euros.
En el siguiente gráfico utilizaremos un gráfico de velas diarias (lo que nos permitirá realizar un análisis con perspectiva de corto / medio plazo), con intención de estudiar este último movimiento en detalle:
Nota1: como todo movimiento tendencial, este último trazado bajista también lleva asociada su correspondiente directriz (señalada con una flecha roja).
La última semana de 2018 el precio se apoyaba en 3,8 euros, soporte de largo plazo, desde donde desplegó un rebote al alza (señalado en azul en el gráfico 2). Ahora bien, es importante resaltar que a pesar de que durante la última semana este rebote ha logrado superar la directriz bajista, la ruptura no se habrá producido con solidez hasta que pueda descartarse lo que en análisis técnico se conoce como ruptura en falso, para lo cual deberá superar el rango de resistencias en 4,45 y 4,6 euros, confirmando así el cambio de tendencia.