Red Eléctrica (REE) acaba de presentar un modesto crecimiento con un beneficio neto ajustado del 1% en el primer trimestre del año 2019, con unos ingresos de 500 millones de euros. La inesperada decisión de EEUU de imponer nuevos aranceles a China nos hace apostar por valores defensivos. Además, la filial más importante de REE supone el 93% de sus ingresos, decisión que apenas afectarían a su cuenta de resultados.
A pesar de la buena sintonía de los mercados de renta variable en lo que llevamos de año, la eléctrica es uno de los pocos valores dentro del selectivo español que se encuentran en rojo, con una caída de más de 6% en este año. Las acciones han retrocedido de los máximos de los 20,5 euros a los mínimos actuales cercanos a los 18 euros. Este nivel fue una zona de fuerte resistencias durante el año 2018 en la que se acumuló gran cantidad de papel.
A nivel técnico, la cotización de la compañía parece respetar el nivel 50 del retroceso de Fibonacci de los 17,8 euros, desde su último fuerte movimiento impulsivo.
Además, el indicador RSI perforó el nivel 30 que muestra una señal de compra ante una venta masiva de títulos del valor. Esto hace pensar en buscar una estrategia alcista en que tomaríamos como objetivo la zona de resistencias de los 20,5 euros. Desde los precios actuales supondría una revalorización de más de un 12%.
La noticia de Trump de elevar los aranceles a China de un 10% hasta el 25% puede ser una medida de presión para llegar acuerdos comerciales. Si finalmente se produce ese sello los inversores podrían mover el capital de valores más defensivos a sectores más atractivos.
La media móvil de 100 sesiones (línea gris) aún continúa por debajo del precio. En este sentido, intentaremos minimizar el riesgo de la operación colocando un freno por debajo del mencionado nivel 50 del retroceso de Fibonacci en los 17,8 euros.
Guillermo Torrego es analista de XTB.