Nuestros smartphones actúan como cualquier ordenador, donde hay aplicaciones que abrimos y cerramos, mientras que otras  están abiertas constantemente (ojo con los permisos que damos a las aplicaciones cuando las instalamos). Estas apps pueden estar conectándose continuamente para verificar nuevos avisos, buscar actualizaciones, enviar status... procesos asociados que consumen datos y no son "visibles" para el usuario. Afortunadamente es bastante sencillo restringir esta actividad en segundo plano en tu smartphone Android. 

¿Cómo sabemos qué apps están consumiendo datos en segundo plano?

Para saber que aplicaciones están ejecutándose en segundo plano tenemos que acceder a las opciones de desarrollador. Para ello habría que hacer lo siguiente:

En versiones de Android previas a Marshmellow (6.0) hay que ir a Ajustes > Acerca del teléfono y tocar la opción de "Número de compilación" 7 veces hasta activar las opciones de desarrollador (no visibles hasta ese momento). Ajustes > Opciones del desarrollador > Servicios en Ejecución

En versiones de software Marshmellow o posteriores estas opciones de desarrollador aparecerán dentro de Ajustes > Memoria > Memoria usada por aplicaciones, desde ahí puedes detener manualmente cualquier aplicación que se esté ejecutando.

Tras lo cual tendremos que decidir que aplicaciones cerramos y cuáles no deberíamos cerrar nunca, ya que son procesos del propio sistema operativo y cuya detención podría provocar un reinicio del smartphone o que dejará de funcionar correctamente. 

Como regla general indicar que no se debería parar o desinstalar ninguna aplicación/proceso que corresponda al propio sistema operativo (los identificados con el icono de Android o de Google), sin embargo aplicaciones que no estamos usando en ese momento o que no es necesario que estén abiertas constantemente (reproductores de música, Facebook...).

¿Cómo evitamos que vuelvan a ejecutarse estas apps en segundo plano?

Evidentemente lo más sencillo seria desinstalar aquellas aplicaciones que no usemos o que no necesitemos (Ajustes > Aplicaciones > Desinstalar), pero si queremos hacer algo que sea menos drástico para evitar que estas aplicaciones que acabamos de detener sigan operando en segundo plano, tenemos tres alternativas: 

Invernar la aplicación usando una aplicación que te permita congelar su uso en segundo plano cuando no las estés usando, como la aplicación Hibernate, de esta forma no tendrán impacto en tu batería o en el consumo de datos sin que te des cuenta.  Limitar la transmisión de datos a las apps en segundo plano, accedemos a Ajustes > Aplicaciones en Red e ir desmarcando la opción de Datos Móviles de aquellas apps que no queramos que consuman datos salvo que sea cuando estén en Wifi. Si tienes un smartphone con Android 6.0 (Marshmallow) o superior puedes ir a Ajustes > Privacidad y Seguridad > Permisos aplicaciones y revisar los permisos como el de Localización,  y decidir si algunas de las aplicaciones realmente necesitan de dichos permisos. Al revocar algunos de los permisos vamos a reducir sensiblemente la actividad en segundo plano, eso sí, ten en cuenta que en algunos casos puede provocar que dicha aplicación deje de funcionar correctamente.

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