CaixaBank ha presentado este martes su plataforma de fondos de inversión Ocean, dirigida a clientes con más de medio millón de euros de patrimonio, con la que aspiran a gestionar 1.000 millones de euros anuales y captar hasta 6.000 clientes en tres años.
En rueda de prensa, el director ejecutivo de Banca Privada de CaixaBank, Víctor Allende, ha explicado que se trata de la primera plataforma que ofrece fondos de terceras gestoras con información y condiciones personalizadas por cliente según el modelo de servicio que tengan.
Los clientes, que en principio sólo serán los 60.000 de Banca Privada, podrán elegir entre 2.000 fondos de 140 gestoras, alguna española, pero tendrán que gastar un mínimo de 20.000 euros en su primera inversión.
Las gestoras que se vayan incorporando tienen que cumplir tres requisitos: tener una cuenta "omnibus" -que agrupa los activos de varios clientes en una misma cuenta-, estar en la plataforma Allfunds e incorporar en el folleto la posibilidad de cobrar comisiones de custodia.
"Hasta para nosotros ha sido una sorpresa la cantidad de clientes que han aceptado pagar a cambio de asesoramiento", ha dicho Allende, para quien lo más destacado de esta oferta es "su absoluta transparencia"
Y es que la industria tiene en términos generales un problema de "condiciones poco transparentes" a la hora de ofrecer estos productos, en los que "liamos a los clientes con modelos enrevesados de negocio" y ya no saben si les van a cobrar comisiones.
Los clientes que quieran utilizar este servicio tienen tres posibilidades: los clientes "broker" no asesorados, a los que se les cobra una comisión del 0,75% y se le devolverán en cuenta los incentivos cobrados de terceros (rebates).
La segunda opción es el cliente con asesoramiento no independiente, a los que se les permite acceder a las clases de fondos más baratas y no pagar comisión de custodia.
Y por último, los clientes "wealth", que reciben asesoramiento independiente, que tienen acceso a clases de fondos "limpias", es decir, que no tienen comisión de retrocesión, pero tienen que pagar un mínimo anual de unos 30.000 euros.