Este 1 de enero entran en vigor nuevas condiciones para jubilarse y métodos de cálculo de las pensiones. Del mismo modo, se ponen en marcha aumentos en los montantes recibidos en cada una de sus modalidades. Invertia hace una revisión de cada uno de estas modificaciones claves para entender la jubilación durante el año 2021.
Lo más destacado es que desde enero de 2021 será necesario tener cumplidos los 66 años de edad para acceder a la jubilación. Del mismo modo, se computarán las aportaciones de los últimos 24 años para calcular el montante que se abonará en 14 pagas.
Del mismo modo, será inprescindible tener 36 años de cotización para tener derecho al 100% de la pensión, y 37 para que puedan retirarse con el 100% quienes cumplan 65 años y opten por abandonar el mercado de trabajo.
La cuantía de la primera pensión es el resultado de las cotizaciones aportadas como máximo en los últimos 24 años, a las que se aplicará un coeficiente en función de los años cotizados, con un máximo de 36, el mínimo exigible para llegar al 100% de la pensión.
En relación con esta cuantía, el 1 de enero entran en vigor los nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE), con modificaciones por primera vez en casi cuatro años. En ellos se recoge un aumento del 0,9% para las pensiones contributivas. El Gobierno considera que se ajustarán así al cierre del IPC de diciembre, aunque se va a incrementar en algo más de 5.000 millones de euros el gasto.
A esa cantidad habría que sumarle la revalorización de aquellas prestaciones no contributivas (entre las que está el Ingreso Mínimo Vital) que será del 0,8%. Es decir, que se van a destinar en total más de 163.297 millones de euros a pagar las prestaciones. Un 3,2% más respecto al año anterior.
Con estos cambios, aquellos pensionistas que cobren una pensión contributiva (o quienes vayan a entrar el año que viene en el sistema) cobrarán, de media, 11,8 euros más que este 2020 hasta alcanzar una pensión media de 1.324 euros.
En el caso de los autónomos la cifra cambia. La subida media es de siete euros hasta alcanzar los 786 euros por prestación. En el caso de las pensiones de viudedad, el incremento será de unos 6,9 euros hasta los 782,5 euros para régimen general. En el caso de los autónomos la media estará en los 529 euros y el alza será de 4,7 euros.
En cuanto a los presupuestos de la Seguridad Social, el Gobierno proyecta un "fuerte" incremento de la recaudación por cuotas por la esperada recuperación del PIB, en contraste con la disminución experimentada en 2020 a causa de la crisis sanitaria por las exoneraciones de cuotas en los ERTE y en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
En concreto, la Seguridad Social ingresará el año próximo 157.562 millones de euros, de los que 125.144 millones de euros procederán de las cotizaciones sociales, con un crecimiento sobre el ejercicio anterior del 3,8%, lo que le permitirá financiar el 72,6% del Presupuesto. El sistema recibirá además transferencias del Estado por valor de 31.177 millones de euros.