Año nuevo, ¿impuestos nuevos? Pues, de cara a 2024, más que de impuestos nuevos, lo que sí se puede hablar es de novedades respecto a algunos de ellos. Y los afectados serán tanto particulares como autónomos y empresas.

Conviene recordar que el gobierno de Pedro Sánchez tiene previsto recaudar 382.755 millones de euros en 2024. Es decir, un 7,5% más que en 2023. Esta es la cifra que envió a Bruselas en el Plan Presupuestario que elaboró estando todavía el Gobierno en funciones.

Un texto que también incluía los efectos de las subidas de los impuestos planeadas para 2024. Así, si a la subida del PIB (el Gobierno estima que estará alrededor del 2% el próximo año) se añade la inflación y el empleo, más las subidas de impuestos y de cotizaciones sociales, supondría una recaudación adicional de 7.355 millones de euros.

¿Qué va a pasar con el IRPF?

El Gobierno espera recaudar 204 millones más por el IRPF. Esto será así por el aumento de los tramos del ahorro aprobados en 2023. Un incremento que se tradujo en un punto más de presión para aquellas rentas de capital inferiores a 200.000 euros, hasta el 27%.

Asimismo, se creó un nuevo tramo, en esta ocasión al 28%, para los beneficios por inversiones que superen los 300.000 euros. Estos incrementos acabarán reflejándose en la declaración de la Renta de 2023, que se realizará entre abril y junio de 2024.

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Además, los trabajadores por cuenta ajena verán como su nómina va a sufrir un particular ‘mordisco’ por parte de Hacienda. Y será así por el denominado como Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI).

En 2023 ya se aplicó por primera vez. Entonces, la cotización fue de un 0,6% y se calculó sobre la base de cotización de contingencias comunes. Un porcentaje que es asumido entre trabajador y empresa: un 0,1% el primero, y un 0,5%, el segundo. En 2024, ese porcentaje será del 0,7%. Y se repartirá de la siguiente manera: el 0,58% corresponderá a la empresa, y el 0,12% al trabajador.

¿Qué otros impuestos van a subir?

Más allá del IRPF, hay otra serie de impuestos que van a subir y que supondrán una merma en el bolsillo de los consumidores. En el caso concreto de los autónomos, el Gobierno recaudará 155 millones tras los cambios en los gastos de difícil justificación y la reducción de módulos. A ello hay que añadir otros 170 millones por los cambios autonómicos por la adaptación de los tramos de IRPF en la escala regional.

Porque el Ministerio de Hacienda elimina la reducción extraordinaria del 10% en el IRPF para aquellos autónomos que tributen por el sistema de estimación objetiva (módulos). Medida que afecta a unas 430.000 personas. A ello hay que añadir otros 170 millones por los cambios autonómicos por la adaptación de los tramos de IRPF en la escala regional.

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Además, aquellas personas físicas que hubieran estado dadas de alta en el Régimen Especial de Trabajadores por Cuenta Propia o Autónomos (RETA) o en el Régimen Especial de la Seguridad Social de los Trabajadores del Mar, estarán obligados a presentar la declaración de la Renta. Y será así independientemente de cuáles hayan sido sus ingresos.

Anteriormente, sólo tenían que realizar la declaración aquellos autónomos que hubieran obtenido rendimientos netos a través de sus actividades económicas por encima de los 1.000 euros al año. También si hubieran obtenido rentas inmobiliarias por encima de los 1.000 euros anuales.

Un trabajador autónomo. Joaquín Corchero Europa Press

Tampoco conviene olvidar que los contribuyentes madrileños y andaluces abonarán en 2024 el Impuesto sobre Patrimonio. Se trata de aquel que grava las fortunas por encima de los dos millones de euros. En el otro extremo, los habitantes de Baleares, La Rioja, Aragón y Comunidad Valenciana no pagarán (o lo harán menos) el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Lo tendrán bonificado entre el 99% y el 100%.

Por último, y dentro de las medidas aprobadas en el último Consejo de Ministros de 2023, se aprobó retirar de manera progresiva la rebaja del 5% del IVA para la electricidad y el gas. 

A partir del 31 de diciembre, el IVA a la electricidad, el gas, la madera y el pellet dejará atrás el 5% y las bonificaciones se eliminarán progresivamente. Será una subida escalonada del IVA de la luz durante los próximos seis meses hasta el 10%, hasta regresar al 21% habitual.

En el caso del gas, también se situará en el 10% pero no será hasta febrero, para luego llegar al 21%. La tarifa regulada de gas (TUR) para las comunidades de vecinos, por su parte, desaparecerá el 31 de diciembre.