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El reloj sigue corriendo para que las aseguradoras den su visto bueno o no a las condiciones puestas sobre la mesa por el Gobierno para que continúen en Muface (Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado).

De hecho, tanto DKV como Asisa y SegurCaixa Adeslas van a esperar hasta el último día para dar su conformidad o rechazar las condiciones económicas del Gobierno para los dos próximos años.

En concreto, la fecha tope que tienen para hacerlo es el próximo 5 de noviembre. Y aunque la propuesta no es del todo de su agrado, no la han rechazado de pleno. La están estudiando e, incluso, están abiertas a seguir en pérdidas.

¿Cuál es la diferencia entre Gobierno y aseguradoras?

Fue el pasado 8 de octubre cuando el Consejo de Ministros autorizó la licitación del nuevo concierto para 2025 y 2026. Traducido a euros, son 1.337.059.970 euros en 2025 y 1.344.553.098 euros en 2026. En total, 2.681.613.068 euros.

Dicho de otra manera, un incremento de las primas del 17,12%. O, lo que es lo mismo, 304.949.078 euros más respecto al último año de vigencia del concierto anterior. Según el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, “la mayor subida de la serie histórica”.

Ese porcentaje es superior al que en un primer momento planteó el Gobierno (14%). Sin embargo, está por debajo del 24% que propuso Muface, y del 40% que pedían las aseguradoras.

Por tanto, la subida propuesta por Muface supondría inyectar 570 millones de euros más al sistema. En el caso de las aseguradoras, hablamos de 950 millones de euros más. Por tanto, la diferencia entre lo que propone el Ejecutivo y Muface es de 266 millones de euros, mientras que esa cantidad respecto a lo sugerido por las aseguradoras es de 646 millones de euros.

La importancia de Muface

Como ya se ha dicho, habrá que esperar al 5 de noviembre (si no deciden las aseguradoras adelantar la fecha) a ver la respuesta de DKV, Asisa y SegurCaixa Adeslas. De momento, están abiertas a seguir en pérdidas. 

Dichas pérdidas ascienden a 470 millones de euros durante los tres últimos años (periodo del último concierto), según las estimaciones de DKV. Dicho de otra manera, la subida propuesta por el Gobierno para los dos próximos años está por debajo de las pérdidas acumuladas por las aseguradoras. Por tanto, es insuficiente.

Otro punto que conviene tener en cuenta es que se trata de un concurso. Por tanto, al mismo se puede presentar cualquier otra compañía aseguradora. ¿Qué consecuencias tendría que el concurso quedara desierto?

Según la Fundación IDIS, al tener que pasar los mutualistas a la sanidad pública, se incrementaría en un 2% las visitas a la Atención Primaria; habría un aumento del 266% en el número de pacientes en listas de espera; y el gasto sanitario público subiría en 1.214 millones de euros.