Los beneficios fiscales para 2019 han sufrido un tajo en el Impuesto sobre Sociedades, según contempla la memoria fiscal. No es el único, Patrimonio y Renta de no residentes también tendrán menos incentivos. Como consuelo para las empresas, hay algunas deducciones que se escapan de los recortes.
El conjunto de beneficios fiscales que el Gobierno ha previsto en la memoria fiscal que acompaña a los Presupuestos asciende a 37.237 millones, un 6% más que la cifra actualizada de 2018. Sin embargo, esos beneficios no aumentan en todas las partidas. En concreto, en tres impuestos (Patrimonio, Sociedades y renta de no residentes) bajan.
Según reza la memoria, la primera “de las etapas que se han de abordar para la elaboración del presupuesto de beneficios fiscales está constituida por la selección, con criterios objetivos, del conjunto de conceptos y parámetros de los tributos que originan beneficios fiscales para los contribuyentes y merman la capacidad recaudatoria del Estado”. Para 2019 el porcentaje de los beneficios fiscales sobre el total de ingresos tributarios es del 22,4%, o lo que es lo mismo, el Estado deja de ingresar 37.237,23 por estos incentivos que, en el caso de no existir, se sumarían a los 128.858 millones de recaudación.
El impuesto sobre el Patrimonio tiene un recorte de beneficios fiscales del 24,3%, le sigue Sociedades con un 2,7% menos de incentivos que el presupuesto del año pasado ya actualizado. Por último, el impuesto sobre la renta de los no residentes también baja un 1%.
SE LIBRAN DE LOS RECORTES
Respecto al Impuesto sobre Sociedades, el total de beneficios fiscales supone un 11% sobre el total de ingresos, la segunda cifra más baja solo por detrás del Impuesto sobre los Gases Fluorados de Efecto Invernadero.
Los incentivos existentes están compuestos por un conjunto de incentivos que actúan en la base imponible y corrigen el resultado contable, por reducciones en dicha base, por la aplicación de tipos reducidos de gravamen, junto con una serie de bonificaciones y de deducciones que minoran la cuota íntegra.
De los ajustes en la base imponible, tienen más presupuesto las dotaciones a la reserva para inversiones en Canarias, el régimen especial de entidades parcialmente exentas; en cuenta a las bonificaciones en la cuota íntegra, se potencia la creación de empleo para trabajadores con discapacidad y los contratos de apoyo a emprendedores. En las bonificaciones en cuoat íntegra, las entidades que operan en Ceuta y Melilla o la prestación de servicios públicos locales, entre otras.
Los ocho elementos con una mayor magnitud son la deducción por actividades de investigación y desarrollo e innovación tecnológica (I+D+i), los saldos pendientes de incentivos a la inversión de ejercicios anteriores, la reserva de capitalización, las dotaciones contables a la reserva para inversiones en Canarias, las rentas y explotaciones económicas exentas del régimen fiscal especial de entidades sin fines lucrativos, los tipos reducidos del 19 y 0 por ciento para las SOCIMI, las deducciones por inversiones en Canarias y las rentas exentas del régimen especial de las entidades parcialmente exentas.