Buen año para los fondos de inversión españoles. Y todo ello pese a la fuerte subida de tipos de interés, la volatilidad experimentada por el mercado, las elecciones y la formación del nuevo Gobierno de España y la inestabilidad geopolítica en el resto del mundo, donde prosiguen los conflictos en Ucrania y la Franja de Gaza.
Los fondos nacionales han cerrado el 2023 con cerca de 18.250 millones de euros en captaciones y una rentabilidad anual del 7,2%, según el avance provisional publicado por Inverco.
Comparativamente, las suscripciones netas son casi 1.020 millones más que en 2022, mientras que el rendimiento ha sido diametralmente opuesto, dado que en el ejercicio pasado confluyeron el hundimiento de las bolsas y de los bonos en un año para el olvido, dejando a los inversores una pérdida anual ponderada media del -8,70%.
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De esta forma, los fondos locales encadenan 38 meses consecutivos con entradas netas de dinero. En diciembre, las captaciones han sido superiores a los 80 millones tras rentar un 1,7%.
Si se incluye el efecto mercado, el patrimonio de los fondos de inversión españoles asciende hasta los 347.160 millones de euros, lo que implica un crecimiento anual del 13,2%. Esto es, su volumen se ha incrementado en más de 40.500 millones, conforme a las cifras ofrecidas por la patronal de las gestoras.
El 'boom' de la renta fija
Por categorías de activos, los fondos que más dinero han captado son aquellos que incluyen componentes de renta fija y que se aprovechan de la subida de tipos del Banco Central Europeo (BCE), que ha situado la tasa de referencia en el 4,5% generando un renovado furor por los bonos.
Así, los fondos de renta fija han registrado suscripciones netas de 23.000 millones; los monetarios, más de 4.950 millones; y los estructurados con rentabilidad objetivo a vencimiento, 8.450 millones de euros.