Una revista con Richard Branson en la portada.

Una revista con Richard Branson en la portada. Austin Distel, Unsplash.

Fondos de inversión

UBS pronostica que España tendrá un 10% más de millonarios de aquí a 2028

En la actualidad, unas 1,2 millones de personas disponen de un patrimonio superior al millón de dólares.

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España cuenta con 1,2 millones de personas que disponen de un patrimonio superior al millón de dólares (925.000 euros), lo que les convierte en millonarios o multimillonarios. Un segmento privilegiado de la población que amasa una fortuna de casi 3,1 billones de dólares (2,8 billones de euros).

No obstante, y a pesar de ser una cifra abultada, “España, Portugal y Grecia no han participado en el repunte de la riqueza a escala mundial”, según señala UBS en su informe ‘Global Wealth Report 2024’, con datos de 2023.

Y es que, a tenor de las cifras globales mostradas por el banco suizo, el regreso del crecimiento de la riqueza al 4,2% compensa el desplome de 2022, cuando se contrajo un 3%.

Reparto de la riqueza en España.

Reparto de la riqueza en España. UBS Global Wealth Report 2024.

España ocupa el vigesimosegundo puesto en términos de riqueza media por adulto, con 225.675 dólares (208.563 euros), mientras que si hablamos de la riqueza mediana por adulto, nuestro país escala hasta la decimoquinta posición del ranking de UBS, con 111.270 dólares (102.833 euros).

Suiza y Luxemburgo lideran estas dos métricas con 709.612 dólares (655.806 euros) y 372.258 dólares (344.032 euros), respectivamente.

Más millonarios ibéricos

De cara a 2028, y teniendo en cuenta a los tres países del sur de Europa, los expertos del banco helvético esperan que el número de millonarios -y multimillonarios- en Grecia se mantenga estable, pero aumente aproximadamente un 10% en España y Portugal con respecto a 2023.

En términos generales, las estimaciones de UBS son que, dentro de un lustro, el número de adultos con un patrimonio superior a un millón de dólares habrá aumentado en 52 de los 56 mercados de nuestra muestra.

Sin embargo, también contrasta con que, si bien la riqueza mundial ha seguido una trayectoria ascendente y constante desde 2008, el ritmo de crecimiento ha perdido fuelle en casi todos los mercados.