Desde el pasado 3 de abril, todos los españoles pueden presentar su declaración de la Renta, un momento del año en el que hay que rendir cuentas con el fisco, con resultado favorable para algunos y adverso para otros, en función de si sale a pagar o a devolver.
Para no tener errores a la hora de realizar este trámite, se recomienda informarse adecuadamente de todas las deducciones, ya que Hacienda te devuelve 300 euros si tienes hijos menores de 25 años y 900 euros si tienes dos. No obstante, que puedas acceder a ello dependerá de las deducciones autonómicas, ya que cada comunidad autónoma puede establecer unos beneficios fiscales específicos.
Muchas de estas deducciones tienen que ver con el cuidado de los hijos o de personas mayores, con el pago del alquiler, etcétera. En este caso, no obstante, nos vamos a referir a una ayuda a la que pueden acceder aquellos contribuyentes residentes en el Principado de Asturias, que pueden acceder a una deducción específica para familiar con hijos que se llama "cuidado de un menor de 25 años".
[Qué significa que tu declaración de la Renta "se está tramitando"]
Gracias a este beneficio fiscal, los padres que tengan un hijo tienen la posibilidad de deducir 300 euros, 150 euros cada uno de los progenitores con derecho, y 600 euros a partir del segundo hijo. De esta manera, aquellos que tengan dos hijos verán como se les devuelven 900 euros, y si son tres, 1.500 euros.
La deducción se aplica igualmente hasta que el descendiente cumpla los 26 años de edad, aun cuando no genere derecho a la aplicación del mínimo por descendientes, según lo indicado en el artículo 58 de la Ley del IRPF. La deducción del periodo impositivo en el que el descendiente alcance los 26 años de edad, se calculará de forma proporcional al número de meses en el que se hayan cumplido los requisitos previstos en dicho artículo.
Requisitos para acceder a la deducción
Para poder acceder a esta deducción es necesario que se den una serie de requisitos, que son los siguientes:
- La suma de las bases imponibles general y del ahorro, que se sitúan en las casillas 435 y 460 de la declaración de la Renta, no superen los 35.000 euros en el caso de la tributación individual o los 45.000 euros en el caso de la tributación conjunta.
- Que los progenitores, adoptantes o tutores convivan con el descendiente.
- El cumplimiento del requisito de convivencia debe ser determinado en la fecha de devengo del impuesto.
- En el caso de que haya más de un contribuyente con derecho a la aplicación de este beneficio fiscal, el importe de la deducción será prorrateado a partes iguales en la declaración de cada uno de ellos.
Esta es una deducción que es incompatible con la deducción "por gastos de descendientes de 0 a 3 años".
Cómo añadir las deducciones por hijos
A la hora de presentar la declaración de la Renta hay que tener en cuenta que los hijos pueden reportar diferentes beneficios a efectos fiscales. De hecho, solo por ser padre o madre se pagará menos a la Agencia Tributaria, razón por la cual es importante que sepas cómo agregar estas deducciones en este trámite.
El primer paso para hacer la declaración de la Renta es conseguir el borrador, para luego comprobar como el programa Renta Web de la AEAT facilita los datos fiscales de los que dispone Hacienda. Una vez comprobados, será el momento de poder añadir los datos de los descendientes en el apartado de datos identificativos, de manera que los hijos puedan estar incluidos en la declaración.
En este sentido, conviene destacar que en este trámite se distingue entre hijos menores y mayores de 25 años, además de los hijos sujetos a la patria potestad y los que no. Los 25 años es la edad máxima en la que los descendientes pueden ser añadidos a la unidad familiar.
Cuando se pulsa en el icono de edición del primer hijo, aparecerá en Renta Web una nueva ventana en la que habrá que rellenar sus datos y el vínculo existente. La Agencia Tributaria contempla diferentes opciones según la situación familiar y de si los hijos residen o no con el contribuyente.
De esta forma, se consultará si el descendiente se incluye o no dentro de la unidad familiar, además de que habrá que indicar si ha conseguido ganar dinero por su cuenta y si esta cantidad supera los 8.000 euros anuales. De esta forma, se determinará si se puede o no añadir a la unidad familiar para aplicar el mínimo familiar. Una vez completado este formulario, el hijo ya será parte de la declaración de la Renta.
Así pues, el contribuyente se puede beneficiar de distintas ventajas fiscales por tener hijos, ya sea por nacimiento, adopción, acogimiento o familia numerosa, una serie de deducciones estatales que se pueden sumar a las autonómicas y que suponen poder ahorrar una importante cantidad de dinero al año.
En cualquier caso, antes de incluirlas en la declaración de la Renta conviene informarse bien acerca de los requisitos necesarios para acceder a cada una de ellas, gracias a las cuales se podrá lograr un resultado más favorable en la realización del trámite al que están obligados la gran mayoría de los contribuyentes.