La guerra comercial por captar clientes que han librado en los últimos años las operadoras de telecomunicaciones parece haberse enfriado. O por lo menos así se desprende del paulatino descenso que han registrado las portabilidades y que ha provocado que el número de cambios de operador marcará el pasado mes de abril su nivel más bajo en cinco años.
Según los últimos datos publicados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el pasado mes de abril se produjeron un total de 612.472 cambios de compañía de teléfono en el mercado español de las telecomunicaciones, incluyendo tanto los números de móvil como los de fijo.
Esto representa un descenso del 23,2% en comparación con las 827.792 portabilidades que se registraron en marzo. Respecto al mismo mes de 2021, cuando tuvieron lugar 734.995 cambios de operador, la caída fue del 16,7%.
El dato registrado en el cuarto mes de 2022 fue el más bajo desde abril de 2017, cuando hubo 530.916 cambios de operador. Exceptuando eso sí los datos registrados de marzo a mayo de 2020, cuando la pandemia de la Covid-19 frenó en seco la actividad comercial y el Gobierno limitó las portabilidades para evitar la propagación del coronavirus.
Lejos queda, por tanto, el más de un millón de portabilidades que se llegaron a registrar en septiembre de 2020. O los más de 900.000 cambios de operador mensuales que se producían cada año cuando comenzaba la temporada futbolística y las compañías lanzaban todo su arsenal de promociones para captar clientes de televisión.
Si desglosamos por servicio, el descenso es especialmente llamativo en el caso de la telefonía móvil, donde se produjeron 477.475 portabilidades en abril de 2022. Es también su dato más bajo desde abril de 2017 y supone un 24% menos que en el mes anterior y un 16,3% menos que hace un año.
En el caso de los números de telefonía fija, las 135.007 portabilidades representan la cifra más baja desde agosto de 2021, cuando alcanzaron las 131.665. Quitando ese mes y los tres de confinamiento, hay que remontarse al verano de 2016 para encontrar cifras tan bajas de cambios de compañía.
Motivos del descenso
Fuentes del sector admiten a EL ESPAÑOL-Invertia su sorpresa por la tendencia a la baja mostrada por las portabilidades en los últimos tiempos, que parece estar manteniéndose por el momento. Y eso lleva a una imagen muy distinta a la que se veía hace tres o cuatro años, cuando todas las compañías ponían en marcha agresivas estrategias y promociones para robar clientes a sus rivales. "Se está enfriando el mercado", apuntan.
Entre los distintos motivos que pueden estar detrás de este cambio se encuentra el alto grado de penetración de la fibra en los hogares. En el pasado, una parte de las portabilidades correspondían a usuarios que migraban de una conexión de ADLS a una de FTTH. En abril de 2022, las líneas de fibra alcanzaron los 13,1, mientras que las de ADSL eran de poco más de un millón, por lo que poco margen de cambio queda en este ámbito.
Otra de las razones es que apenas existen ya en el mercado tarifas móviles con pocos datos, ya que incluso las más baratas cuentan con un importante volumen. En consecuencia, se ha reducido considerablemente el número de usuarios que se cambian de una compañía a otro con el objetivo de hacerse con más gigas.
Y a todo ello se suma que cada vez hay menos diferencias en precio entre las tarifas de los operadores, en un mercado además que en los últimos años ha ido inclinándose hacia el bajo coste. "El precio no ha cambiado tanto como para que te resulte rentable cambiar y la gente ya tiene cubiertas sus necesidades básicas con datos ilimitados u otras tarifas", explica Eduardo Velasco, consejero delegado y fundador del comparador Roams.
Los clientes ya no sólo se mueven por precio, sino por el nivel de satisfacción o los servicios de valor añadido que les ofrece su operadora. De hecho, Velasco apunta que estos servicios hacen que los clientes sean más fieles a su compañía. A ello se suma la permanencia que aceptan algunos usuarios a cambio de promociones o financiación de dispositivos.
¿Y a quién beneficia este nuevo escenario? Claramente a las operadoras más tradicionales del mercado (Movistar, Orange y Vodafone), que en los últimos años han visto como los nuevos actores de mercado como MásMóvil y, en los últimos tiempos, Digi les han ido restando cuota de mercado.