España se afianza como el tercer país en penetración de fibra de la OCDE y planta cara a líderes como Japón o Corea
Esta tecnología representa ya el 85,8% de las suscripciones de banda ancha fija en España, 6,8 puntos porcentuales más que en 2021.
6 agosto, 2024 02:00España se consolida como un referente a nivel internacional en el desarrollo de la fibra óptica. El país ha logrado volver a situarse entre los tres miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con un mayor grado de penetración de esta tecnología, superando a grandes potencias en el sector de las telecomunicaciones como Japón y situando cerca del líder, Corea del Sur.
Según los últimos datos publicadas por la OCDE, en diciembre de 2023 el 85,8% de las suscripciones de banda ancha fija que existían en España eran de fibra óptica, lo que supone un incremento de 6,8 puntos porcentuales en comparación con el 79% de 2021. Respecto a 2019, la subida es de 19,1 puntos porcentuales.
Con estos datos, España se sitúa entre los tres países de la OCDE en los que la tasa de penetración supera ya el 80%. El líder sigue siendo, un año más, Corea del Sur, donde se acerca el 90% tras alcanzar a finales de 2023 el 89,6%. El otro es Islandia, que con un 88,7% ha pasado de la sexta posición en 2021 a la segunda en 2023.
El crecimiento de 6,8 puntos registrado por España en estos dos años no sólo permite a nuestro país afianzarse en el podio de la fibra en la OCDE pese a los avances registrados en otros mercados como Islandia, Suecia o Letonia. También recorta distancia con Corea del Sur, ya que la diferencia entre ambos países ha pasado de ser de 16,1 puntos en 2019 a reducirse a 7,6 puntos en 2021 y a 3,8 enteros en 2023.
España también ha logrado este año superar a Japón, uno de los referentes mundiales en el sector de las telecomunicaciones, que en la estadística de 2021 ocupaba la segunda posición. El país asiático ha visto cómo la fibra óptica reducía su penetración en estos dos años en favor de esta tecnología, ya que ha descendido del 83,8% al 79,1%.
Apuesta por la fibra
La temprana apuesta que hicieron las operadoras españolas por el despliegue de redes de fibra óptica ha permitido a nuestro país ir muy por delante en la adopción de esta tecnología que está llamada a sustituir en todo el mundo a otros menos eficaces, como pueden ser el cable o el DLS.
Aunque es imposible saber cómo quedará el próximo ránking que elabore la organización, es previsible que España siga estando a la cabeza en penetración de fibra óptica dentro de la OCDE gracias a los planes de las principales operadoras de telecomunicaciones.
España será uno de los primeros países en apagar sus redes de ADSL. Telefónica ya dejó de comercializar entre sus clientes tarifas de ADSL el pasado 19 de abril, coincidiendo con la celebración de su centenario. El cierre total de sus centrales de cobre, a través de las cuales aún ofrece servicios mayoristas a otros operadores, está previsto para mayo de 2025.
En esta misma línea, Vodafone España anunció a principios de este año que su intención es la de llevar a cabo el cierre de su red de cobre a lo largo de 2024, mientras que la web de Orange (que forma parte ahora del grupo Masorange) informa de que prevé hacerlo en 2025.
Datos globales
La OCDE constata en su estudio del mercado de las telecomunicaciones que las tecnologías de banda ancha de nueva generación (la fibra en fijo y el 5G en móvil) siguen ganando presencia con rapidez en todos los países a medida que se eleva la demanda de conectividad "de alta calidad, asequible y ubicua".
En el conjunto de la organización, las conexiones de fibra óptica representaron a cierre de 2023 el 42,5% del total de suscripciones de banda ancha fija, lo que supone 8,1 puntos porcentuales más en comparación con el 34,4% de 2021. Este porcentaje se ve lastrado por la escasa penetración de la fibra en mercados como Bélgica (7,9%), Grecia (8,3%) y Alemania y Austria (11,2%).
La OCDE destaca el impulso que ha registrado la adopción de la fibra óptica en el conjunto de la organización desde la pandemia de la Covid-19. En concreto, las conexiones se han disparado en cuatro años un 73%, al pasar de los 122 millones de euros en diciembre de 2019 a 211 millones de euros a finales de 2023.
Respecto al apagado de las redes de cobre, la organización detalla que las suscripciones a la tecnología DSL han descendido "significativamente" en los últimos cuatro años y han pasado de representar el 33% de las conexiones de banda ancha fija en 2019 al 20% a finales de 2023.