El transporte público español está tocando con la punta de los dedos recuperar los niveles previos a la pandemia de coronavirus. Durante el pasado mes de junio, último mes en el que tanto la actividad estudiantil como laboral no nota el descenso que llega de la mano del periodo estival, alcanzó un 88,84% de los pasajeros transportados en el mismo mes de 2019.

El dato supone el nivel más alto de recuperación desde abril de 2020. Como muestra el gráfico inferior, durante el primer mes en el que se desplegaron los confinamientos para cortar la transmisión del virus el volumen de pasajeros transportados se desplomó hasta representar un 8,8% de los niveles normales. 

Durante los últimos 27 meses el transporte público en España ha ido recuperando, con algunos pasos atrás, la normalidad. La llegada del teletrabajo y los importantes cambios que ha sufrido en este tiempo la actividad turística han provocado que existan diferencias en comparación con los registros de 2019 pese a que todas las restricciones de movilidad se eliminaron hace meses. 

En lo que respecta al pasado mes de junio, los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) señalan que más de 380,6 millones de pasajeros utilizan el transporte público, un 28,1% más que en el mismo mes del año 2021. El transporte urbano aumentó un 23,3% en tasa anual y el interurbano un 32,7%. Dentro del
interurbano, destaca el incremento del 62,9% en el transporte aéreo.

Valencia y Andalucía encabezan el crecimiento

El estudio del INE señala que el transporte urbano fue utilizado por más de 224,6 millones de viajeros el pasado mes de junio, un 23,3% más que en el mismo mes del año 2021. El transporte por metro aumentó un 29,6% en tasa anual. El metro de Valencia presentó el mayor incremento, del 46,7%, y el de Bilbao, el menor, del 14,9%.

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Entre las ciudades que poseen metro, la mayor subida en el transporte por autobús se registró en Palma (37,2%), y la menor en Bilbao (10,3%). El transporte urbano por autobús aumentó un 19,1% en junio respecto al mismo mes de 2021. Todas las comunidades autónomas presentaron tasas anuales positivas en el transporte por autobús.

Las mayores subidas se dieron en la Comunitat Valenciana (28,4%), Andalucía (22,8%) y Región de Murcia (22,3%). Por su parte, Galicia (12,0%), Aragón (12,7%) y País Vasco (13,7%) registran los menores incrementos en el transporte por autobús.

La alta velocidad, disparada

En lo que respecta al transporte interurbano, más de 108,8 millones de viajeros lo utilizaron para desplazarse entre ciudades durante el sexto mes de 2022, lo que supone un incremento del 32,7% respecto al mismo mes de 2021.

Por tipo de transporte, el aéreo creció un 62,9% de la mano del primer impulso turístico. Con respecto a los crecimientos, el transporte marítimo le siguió con un incremento del 51,4%, el autobús llegó a un 35,3%, y el ferrocarril un 27,1%.

Los desplazamientos en Cercanías subieron un 32% en el transporte por autobús y un 23,6% en el transporte por ferrocarril en junio. La media distancia creció un 43,3% en el transporte por autobús y un 55,2% en el ferroviario. La larga distancia aumentó un 62% en el transporte por autobús y un 65,6% en el ferrocarril. Dentro de este último, la alta velocidad se disparó un 82,2%.

Bonificación del transporte público

Los datos de junio son los últimos que pueden ayudar a entender qué puede pasar cuando el próximo 1 de septiembre arranquen las bonificaciones y los descuentos tanto en las tarifas como en los abonos de transporte. Un plan que, en principio, durará cuatro meses en los que el transporte público español entrará en un contexto nunca antes conocido.

Con la puesta en marcha de bonificaciones de hasta el 100% de las tarifas de los Cercanías ferroviarios o del 50% en otras opciones de transporte a partir del 1 de septiembre, se espera que se dispare, sobre todo, en algunos momentos del día. Algo que genera preocupación dentro del sector, sobre todo, por la potencial tensión durante la hora punta.

Así las cosas, en poco más de tres semanas el transporte público español verá culminada una recuperación para la que ha necesitado más de dos años. La llegada del plan de bonificaciones del Gobierno no sólo afectará al volumen total de pasajeros transportados sino que, además, se espera que genere un salto entre diferentes modos de transporte.

En este nuevo contexto, el ferrocarril parte con una gran ventaja, sobre todo en lo que se refiere a los Cercanías, dado que contará con una bonificación mayor que el resto. Algo que ha generado gran inquietud entre los operadores de transporte por carretera. El próximo mes de septiembre se despejarán muchas de estas incógnitas.