El sector de la automoción vive una situación límite. La concatenación de crisis, primero de la Covid-19 y después de la escasez de semiconductores, está exprimiendo las capacidades de una de las industrias más importantes para la economía española. Una situación que se pudo evidenciar en el discurso que Wayne Griffiths, presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones, realizó durante la celebración de la segunda edición de los Premios Impulso a la Movilidad. 

"Necesitamos tomar medidas de manera urgente. Estos últimos años están siendo una prueba de fuego para nuestra industria. Por un lado, diferentes crisis nos están golpeando. Por el otro, los plazos de la electrificación de la industria marcados por Europa cada vez son más cortos. Estamos dispuestos a afrontar este reto, pero necesitamos apoyo para que España siga ocupando su actual lugar en la industria de la automoción", detalló Griffiths. 

Un respaldo que, para el presidente de Anfac, tiene nombre y apellidos: "Necesitamos una resolución rápida y acertada del PERTE del vehículo eléctrico y conectado. Es un instrumento clave para la transformación de nuestra industria. No tenemos plan B y es clave para acelerar el camino que tenemos por delante".

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Del mismo modo, Griffiths ha expuesto una serie de medidas que, desde la industria de la automoción, son vistas como fundamentales para acelerar la adopción de los vehículos eléctricos. "No sólo es importante fabricar coches. También debemos venderlos. España está a la cola de Europa. De nada sirven las mesas de diálogo si no se toman medidas de peso".

De la fiscalidad a la infraestructura de carga

En este sentido, mejorar las condiciones para fomentar la compra de automóviles eléctricos es clave para el presidente de la asociación. "Hemos presentado un plan de 13 medidas urgentes al Gobierno. Necesitamos mejoras en la fiscalidad, ayudas directas a la compra y reducir el IVA de los vehículos eléctricos".

"Además, debemos acelerar el despliegue de la infraestructura de carga que permitirá a los usuarios de la movilidad eléctrica desplazarse con libertad. Las metas a largo plazo son fundamentales, pero es importante poner objetivos anuales que nos permitan evaluar la evolución de este elemento clave para popularizar los nuevos modelos", ha detallado Griffiths.

Y es que, los actuales volúmenes de venta de vehículos eléctricos en España están muy lejos de los de otros países. "Un país como Portugal está consiguiendo que los vehículos electrificados ya supongan el 20% de las ventas cuando en nuestro país estamos en el 10%. No podremos atraer inversiones si no vendemos coches eléctricos en nuestro mercado".

De esta manera, el máximo exponente de la industria de la automoción en España ha lanzado un mensaje contundente en un momento clave para el sector. La resolución del PERTE por parte del Ministerio de Industria supondrá un antes y un después para los fabricantes españoles. Una decisión clave de la que dependen miles de puestos de trabajo y que exige que el sector público y privado vayan de la mano para hacer frente a la mayor transformación de la industria de la automoción. Una idea con la que el presidente de Anfac concluyó su discurso: "Juntos somos más fuertes".