Ford Almussafes acudió este viernes con una propuesta llamativa a la negociación del ERE con los sindicatos. Ofrece una aportación extra de 20.000 euros a quienes acepten su despido antes del próximo mes de julio, además de 45 días por año trabajado.
Se trata de "20.000 euros brutos de indemnización adicional a la cantidad correspondiente", según ha trasladado la compañía por escrito a los representantes de los empleados.
La mencionada "cantidad correspondiente" será, para los empleados de hasta 54 años, de 45 días por año trabajado, con un máximo de 42 mensualidades y un mínimo de 12.
La oferta cumple una reclamación fundamental de UGT, el sindicato mayoritario, que pidió a la firma, tal y como recogió este periódico, que las salidas para los empleados más jóvenes "estén muy bien incentivadas".
La compañía, en cambio, no cede por el momento a la petición de ampliar las prejubilaciones por debajo de los 55 años. Plantea salidas con el 80% del sueldo para trabajadores de hasta 56 años y del 85% para los que tengan 57 o más.
Ford Almussafes aspira a prescindir de 1.144 trabajadores con el presente expediente de regulación de empleo. La fábrica tiene futuro a largo plazo, porque ha sido elegida por Ford para la fabricación, a partir de 2026, de dos de los nuevos coches 100% eléctricos de la marca. Pero, hasta que llegue ese momento, va a atravesar un duro valle productivo que requerirá las bajas incentivadas o despidos.
"Aproximadamente 1.100 puestos de trabajo están afectados, principalmente, debido al ya anunciado cese de la producción de los modelos S-Max y Galaxy en abril de 2023. Ford trabajará constructivamente con los sindicatos para reducir el impacto de esta situación en los empleados, sus familias y la comunidad local", precisó la compañía a sus trabajadores.
La planta ha retenido unos meses la producción que iba a perder de la furgoneta Connect, pero también va a dejar de producirla. Además, perdió recientemente la fabricación el Ford Mondeo.