El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente. EFE.
Puente cierra filas: confía en la legalidad de los contratos del 'caso Koldo’ y descarta una purga en Transportes
El socialista rebaja a una sola persona del Ministerio la posible relación con la trama corrupta y respalda a su subsecretario, que declara como testigo.
28 febrero, 2024 02:34Óscar Puente está dispuesto a someter a una auditoría específica todos los contratos de compras de mascarillas en el punto de mira por el caso Koldo para dirimir responsabilidades. Sin embargo, el ministro de Transportes confía en que esos contratos fueron hechos conforme a la ley -hasta donde él conoce, asegura, así es- y también en que no será necesario llevar a cabo ceses en su Ministerio.
Durante una rueda de prensa este martes para explicar cómo será la auditoría que su departamento va a poner en marcha, el exalcalde de Valladolid ha rebajado a una sola persona de su Ministerio la posible vinculación con la trama corrupta del que fuera asesor de José Luis Ábalos. Concretamente, al "hermano del señor Koldo", que es como Puente se ha referido a Joseba García Izaguirre.
Asimismo, el ministro ha respaldado al subsecretario de Transportes, Jesús Manuel Gómez García, funcionario de carrera que ejerce dicho cargo desde 2018. Puente lo ha definido como "un gran profesional" y ha añadido que éste le ha negado "cualquier vinculación con la trama" y que él está "satisfecho" con sus explicaciones, de manera que ordenar su cese "sería una injusticia".
Lo cierto es que Gómez García sí que ha sido citado a declarar en el curso de la investigación de la Operación Delorme, pero, como otros, lo ha hecho en calidad de testigo. De ahí que Puente no quiera "manchar su nombre" cuando, "de momento", no figura entre los investigados en la Audiencia Nacional.
Asimismo, el vallisoletano ha querido mostrar distancia con el anterior equipo ministerial: "cuando llegué a este Ministerio prácticamente cambié a todo el equipo". De hecho, uno de los pocos que sí tuvo continuidad en el cargo fue, precisamente, Gómez García.
Además, ha recordado que "hace cuatro años, vivía a 200 kilómetros de aquí (Madrid)", en referencia a que él estaba en Valladolid en el momento en que se produjeron las supuestas comisiones.
Todo esto ha llevado a Puente a pedir que no se involucre a "personas que no tienen relación". Se ha referido a ellos como "trabajadores de la casa" y ha añadido que, aunque se sabe "una pieza a batir", no tiene nada que ver con los hechos. Así, ha insistido en que "dejen a los funcionarios tranquilos".
Sobre el hermano de Koldo, el ministro ha abundado sobre el día en que fue detenido. Según ha explicado, se encontraba "prestando servicios" en Vitoria. Lo hacía, ha explicado, como personal de una brigada de limpieza de Emfesa, empresa pública dependiente de Adif.
"Estaba llevando unas máquinas desbrozadoras en un vehículo de la empresa cuando es detenido; lo detienen y, una vez que es puesto en libertad, se reincorpora a su trabajo", ha detallado Óscar Puente. Y ha añadido que "es la única persona que queda en el Ministerio que esté afectada por la investigación". Afectada, ha matizado, en el sentido de estar "directamente implicada en esta investigación".
Un policía y un guardia civil
El ministro de Transportes también se ha referido al caso del hermano del presidente del Zamora Club de Fútbol, Víctor de Aldama, detenido por ser uno de los presuntos comisionistas. Se trata de Rubén de Aldama, que "nunca ha estado detenido". Su nombre ha salido a la palestra porque este policía nacional durante unos años estuvo destinado en el Ministerio.
"Es un policía nacional de carrera que no ha sido detenido, ni está investigado, hasta donde nosotros sabemos", ha señalado Puente. Sobre su vinculación con su departamento, el ministro ha señalado que ya no forma parte del mismo "desde hace bastante tiempo". De hecho, ha apuntado que ni siquiera llegó al Ministerio con Ábalos, sino que lo hizo en 2016, con el popular Íñigo de la Serna al mando.
De acuerdo con Puente, el citado policía no se aprovechó de la confianza que pudiera tener con Ábalos para actuar como intermediario en la trama. Y sobre el guardia civil que trabajó en el Ministerio y que sí ha sido detenido, Puente ha asegurado que "lleva fuera (de Transportes) al menos desde el verano del año 2019".
Puente busca de esta manera un cierre de filas dentro del Ministerio: se revisará todo con lupa, especialmente quién pudo beneficiarse con las comisiones, pero no es una enmienda a la totalidad. Aunque el ministro se muestra expectante ante el resultado de la auditoría, el socialista ha defendido que las auditorías que ya llevaron a cabo el Tribunal de Cuentas y la Intervención General del Estado no encontraron nada ilegal en los contratos.
Es más, defiende que esto no puede ser el foco de la investigación. Aunque admite que puedan darse un nuevo resultado, en tanto que la nueva auditoría tendrá una mirada diferente, entiende los posibles errores de las contrataciones a principios de la pandemia. "Era un momento muy complicado", asegura el ministro, y el foco, por tanto, debe estar en saber quién se ha lucrado.
