Trenes de Ouigo, Renfe e Iryo, en imagen de archivo.
Los efectos de la liberalización que Óscar Puente critica: más oferta, más viajeros y precios más bajos que los del AVE
El ministro se quejó de las bajas tarifas de Iryo y Ouigo porque lastran los resultados de Renfe.
22 marzo, 2024 01:55El 14 de diciembre de 2020 arrancó oficialmente la liberalización ferroviaria en España, aunque no fue hasta mayo de 2021 cuando llegó Ouigo de la mano de la francesa SNCF. Poco después sería el turno del Avlo, el tren de bajo coste de Renfe. Y en noviembre de 2022, arrancó operaciones Iryo (consorcio formado por Air Nostrum, Trenitalia y Globalvía). Tres años después de la entrada de competencia, el ahora ministro de Transportes, Óscar Puente, critica y señala a los competidores de Renfe dejando a un lado los beneficios que este proceso ha traído a los usuarios.
Porque no hay que olvidar que el principal beneficiario de un proceso de liberalización en el que entran varios competidores es el usuario final, especialmente en cuanto al precio. Recordemos que viajar en AVE antes no estaba a la altura de todos los bolsillos.
Ahora, la alta velocidad se ha democratizado y prácticamente cualquiera puede moverse por tren a precios reducidos. Por ejemplo, Ouigo -a quien Puente colocó en la picota esta semana- ofrece precios a partir de 9 euros.
“Nuestro modelo funciona si tenemos una tasa de ocupación del 90%, lo que nos permite ofrecer costes bajos”, defendió Hélène Valenzuela, directora general de Ouigo. Motivo por el cual ha reiterado en varias ocasiones que van a seguir con el posicionamiento de tarifas bajas. Algo con lo que además empezarán a ser rentables este mismo año.
Esta es la respuesta que dieron desde el operador francés al ministro de Transportes que se mostró el pasado miércoles muy crítico con los bajos precios en los servicios de las compañías ferroviarias Iryo y Ouigo porque están lastrando a Renfe. Y lo cierto es que estos precios bajos afectan al operador público, pero benefician al consumidor final ya que Renfe también tiene que bajar tarifas para competir.
El ministro de Transportes, Óscar Puente. EFE
Pero para saber hasta qué punto los precios han bajado hay que irse al último informe sobre el transporte de viajeros por ferrocarril del tercer trimestre de 2023 publicado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
En éste, el organismo revela que la entrada de Iryo en el trayecto Madrid-Sevilla y el Madrid-Málaga produjo un fuerte descenso de los precios respecto al trimestre anterior, del 24% y el 19%, respectivamente, al menos unos 10 euros en todos los productos.
Precio medio del tercer trimestre de 2023 de los viajes en tren en el corredor Madrid-Barcelona. Fuente: CNMC.
Pero hay más ejemplos. En el trayecto Madrid-Barcelona, el precio medio trimestral más bajo fue el de Ouigo con 39,95 euros, seguido de Avlo (40,75 euros), Iryo (41,06 euros) y AVE (62,05 euros). Las cuatro marcas bajaron de precio, pero es especialmente destacable la caída del 6,5% de los precios de AVE. Lo que indica que la competencia obliga a Renfe a bajar los precios.
En el trayecto Madrid-Valencia ocurre lo mismo. El AVE baja las tarifas un 16,3% hasta situarlas en 36,64 euros de media. Aquí la más barata sigue siendo la de Ouigo con 21,31 euros. Y en la ruta Madrid-Alicante es Ouigo el operador con las tarifas más bajas (25,4 euros de media) a pesar de ser el que más las sube (+16,2%).
Más demanda
Los precios bajos de un operador provocan, como ya hemos visto, que el resto baje sus tarifas. Pero también hace que aumente la demanda. “Si bajamos los precios aumenta el mercado”, defendieron ayer desde Ouigo. Es decir, más viajeros a repartir entre los tres operadores: Ouigo, Iryo y Renfe. Y éstos, a su vez, también han incrementado la oferta.
El resultado es el siguiente: entre junio y septiembre del pasado año los servicios comerciales de alta velocidad en España volvieron a marcar un récord de viajeros con más de 8,4 millones (+32% interanual), según los datos más actualizados de la CNMC.
El mayor crecimiento interanual se registró en el corredor Madrid-Valencia (+96% con 1,4 millones de pasajeros), seguido del corredor Madrid-Alicante (+66% con casi un millón) y de los corredores a Andalucía (+30%).
Solo el corredor Madrid-Barcelona (-10%) y el Madrid-Sevilla (-8%) perdieron viajeros con respecto al trimestre anterior, debido al periodo estival, pero los descensos fueron inferiores a los de otros terceros trimestres.
Tren de Ouigo.
Ya en 2022, primer año con todos los operadores en las vías españolas se registró un récord de 23,7 millones de viajeros utilizaron la alta velocidad, un 76% más que durante el año anterior. La principal razón es que la oferta aumentó.
Lo que hizo posible que los corredores donde existe competencia sean los que más viajeros ganaron en 2022, con incrementos del 108,8% en Madrid-Valencia y del 82,6% en Madrid-Barcelona.
Ese mismo año, otro informe de la CNMC asegura que la liberalización hizo que el tren sea más líder frente al avión. De hecho, la entrada de competencia ferroviaria (y la reducción de precios) provocó que en los trayectos con más oferta la cuota de tren suba. Por ejemplo, se situó en el 78,3% en Madrid-Barcelona y en el 89,9% en Madrid-Valencia.
Curiosamente el tren es uno de los medios de transporte más sostenible y, por tanto, entra dentro de la política de sostenibilidad del propio Gobierno.
Cuota
La entrada de competencia no ha desbancado a la empresa pública. Renfe Viajeros sigue siendo el operador más importante en todos los corredores, con una cuota de mercado (agrupando sus productos AVE y Avlo) del 58% de los viajeros en el corredor Madrid-Barcelona, del 50% en el corredor Madrid-Valencia y de entre el 65% y el 74% en el resto de corredores.
Por su parte, Iryo ganó más de 7 puntos porcentuales de cuota en los corredores a Andalucía y ostentó el 32% en el Madrid-Sevilla y el 26 % en el Madrid-Málaga/Granada.
En el corredor Madrid-Barcelona Iryo y Ouigo están a la par con el 22% y 20% de cuota respectivamente; en el Madrid-Valencia Iryo supera en cuota a la francesa (28% frente a 22% de cuota) y en el Madrid-Alicante ocurre lo contrario (10% frente a 26%).
