El consorcio húngaro Magyar Vagon ha admitido que no espera una respuesta rápida del Gobierno a la aprobación de la compra de Talgo, poniendo incluso en duda la viabilidad del acuerdo si este plazo se alarga indefinidamente.
Así lo ha trasladado UGT tras la reunión que los sindicatos tuvieron este miércoles con András Tombor, el alto ejecutivo del consorcio húngaro encargado de lanzar la oferta pública de adquisición sobre el 100% de Talgo por 620 millones de euros.
"Desde Ganz-Mavag (la filial de Magyar que ha formulado la opa) se insta a los sindicatos a ayudar para facilitar la opa, ya que no esperan que la respuesta del Gobierno sea rápida, y ponen en duda la viabilidad del acuerdo si el plazo se alarga indefinidamente", han constatado desde el sindicato.
Cabe recordar que la postura del Gobierno ha sido la de rechazar la opa desde un principio. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, está a la espera de que se constituya una alternativa española a la opa.
Por otro lado, en la reunión con los sindicatos el directivo de la compañía húngara volvió a trasladar su intención de adquirir Talgo para dar solución al exceso de contratos y se comprometió a funcionar como una "alianza" y a mantener la sede y las fábricas de Talgo tal y como están en la actualidad, es decir, en España.
No obstante, no pudo dar por escrito estos compromisos, toda vez que tiene que esperar a que la CNMV apruebe el folleto de la opa, un texto que tampoco han mostrado a los sindicatos, pese a las peticiones de UGT por conocerlo.
"La continua referencia a la rapidez con la que quieren llevar a cabo la compra de Talgo no genera tranquilidad entre la plantilla, ya que si lo que se busca es estabilidad y la colaboración del comité de empresa, no se entiende tanta premura", señalan desde UGT.
Con todo ello, el sindicato lamenta que las reuniones mantenidas tanto con los húngaros como con la dirección de Talgo (también interesada en vender la empresa) hayan creado "mayor incertidumbre e inseguridad".