Así lo ha asegurado András Tambor, el representante de la compañía, quien ha reiterado en varias ocasiones que son “flexibles” y que están abiertos a “recomendaciones y propuestas para que el proceso se desarrolle más rápido”. Eso quiere decir que el consorcio podría valorar la entrada del Gobierno o de alguna empresa en la oferta para hacerse con Talgo.

No obstante, ha afirmado que “hasta la fecha no hemos recibido ninguna propuesta concreta de cooperación”. No obstante, sí ha rechazado una posible colaboración con Skoda.

“Skoda podría estar interesada en una transacción. Solía ser una actor importante, ahora la empresa está en pérdidas y esto hace que no sea un candidato fuerte con el que colaborar”, ha señalado.

Por otro lado, ha calificado a Criteria y CAF como dos empresas “serias”, aunque de sus intenciones sólo sabe por la prensa. A pesar de ello, András Tambor, considera que ahora mismo están “en un punto muy precoz para hablar de operaciones con CAF”.

Rechazo del Gobierno español

De momento, están esperando que el Gobierno apruebe la solicitud que enviaron hace meses. Algo que podría producirse el próximo 10 de agosto siempre y cuando no se le requiera más información adicional a la compañía. “Se podría ampliar el plazo porque el Gobierno quiere saber sobre los potenciales inversores y esperamos pacientes la respuesta del Gobierno”, ha añadido. 

Ante el rechazo público del Gobierno, desde Magyar Vagon han apuntado a que “si hubiera otra contraopa debería superar el precio de 5 euros”. Califican su precio de “elevado”. Cabe recordar que la opa se dirige al 100 % del capital de Talgo por un importe total de 619,3 millones de euros, a un precio de 5 euros por acción.

En este sentido, el representante de Magyar Vagon ha reconocido que no se ha reunido con el ministro de Transportes, Óscar Puente. “Han llegado a mis oídos sus dudas sobre la oferta a través de los medios. Por eso considero que debemos ser pacientes para ofrecer a todo el mundo tiempo para conocer la oferta en detalle y se tome la decisión adecuada”, ha indicado. 

Sí han mantenido múltiples reuniones con varias personas en España, antes y después de presentar el folleto a la CNMV. Se han tratado de “reuniones con el sector y con gente encargada en la toma de decisiones” que le han dejado “impresiones son positivas”.

Relaciones rusas

Asimismo, el directivo ha asegurado que la compañía solo tiene inversores húngaros y ha descartado influencias rusas o políticas. “No tenemos nada que ver con los rusos”.

También ha destacado que esta oferta es “industrial y estratégica y nada que ver con la política”. En este sentido, no esperan que la presidencia de Hungría de la Unión Europea suponga algún cambio en la opa.

Plan industrial

Más allá del as cuestiones políticas, el plan del consorcio es mantener toda la capacidad en España.“Mantendríamos la dirección española y todo se quedaría en España”, incluyendo los puestos de trabajo. 

El grupo cree que puede solventar el problema de capacidad industrial de Talgo. “Podemos aumentar la producción industrial de Talgo drásticamente y que sea un actor de más de 1.000 millones en ingresos”, ha puntualizado. La idea es combinar la tecnología con la que cuenta el fabricante español con la capacidad húngara. 

La oferta, en principio, cuenta, con el apoyo de Pegaso, una sociedad instrumental que ostenta el 40% de las acciones propiedad del fondo Trilantic y las familias Oriol y Abelló. “Es una oferta claramente industrial y esperamos poder reemplazar al actual inversor financiero (Trilantic) y otros configurandonos como un socio a largo plazo para Talgo”, ha añadido.

Tampoco cierran la puerta a que la familia Oriol pudiera quedarse en el accionariado. “Los accionistas minoritarios son bienvenidos”, ha comentado.

Además, cuentan con el apoyo de los bancos para financiar la operación. Una financiación 100% procedente de Hungría. No obstante, Tambor ha destacado que Talgo está financiada por bancos nacionales y la operación lo está por bancos húngaros.