La Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF) ha calificado el descarrilamiento de un tren de Renfe el pasado sábado en Atocha de accidente "grave", pero queda pendiente una investigación técnica sobre el mismo suceso.
Según se detalla en el expediente 108/2024, "el tren circuló por el túnel de alta velocidad de Atocha a Chamartín, pero a la entrada de la estación de Chamartín la unidad de cabeza (remolcadora) sufrió un fallo de tracción que le impidió subir la rampa de entrada a la estación (de unas 30 milésimas)".
"Para superar la rampa, el maquinista y el puesto de mando acordaron que el tren retrocediese para tomar impulso desde un tramo más llano. Mientras se preparaba esta maniobra, la unidad de tren averiada (la remolcada) se soltó de su enganche y comenzó a derivar túnel abajo sin frenos, sin batería y con los dos técnicos a bordo", continúa el documento.
"Después de más de cuatro kilómetros de deriva por el túnel (con pendientes de entre 12 y 30 milésimas), la unidad llegó a gran velocidad al puesto de banalización de Jardín Botánico, donde fue cambiada de la vía nº 1 a la nº 2. En la siguiente curva tras el cambio de vía, la unidad descarriló y se salió por la tangente, chocando contra el muro del túnel. Los tres primeros coches de la unidad (en el sentido de la deriva) volcaron, mientras que el cuarto permaneció descarrilado, pero en posición vertical. Tras deslizarse una cierta distancia perdiendo velocidad, la unidad se detuvo aproximadamente en el PK 7,000", continúa explicando el expediente que recoge las conclusiones de la investigación.
Con todo, la CIAF concluye que "no hubo víctimas mortales ni heridos graves, pero sí daños serios, tanto en la unidad accidentada como en la infraestructura del túnel".
El gestor de la infraestructura ferroviaria, Adif, ha garantizado que las empresas ferroviarias podrán seguir prestando los servicios Valencia-Madrid con llegada a Chamartín, tal y como ha estado ocurriendo esta semana y antes del descarrilamiento del pasado fin de semana, que desató el caos en el transporte ferroviario.
Las tres empresas que operan la alta velocidad (Renfe, con sus dos marcas AVE y Avlo; Ouigo e Iryo) han confirmado a Efe que el fin de semana operarán con normalidad desde Chamartín hacia el corredor de Levante, que era el afectado por este incidente. En un principio se manejó la posibilidad de que tuvieran salida y entrada en Atocha en lugar de en Chamartín.