Ford dijo el miércoles que recortará alrededor del 14% de su plantilla europea, atribuyendo el suceso a pérdidas significativas en los últimos años agravadas por la débil demanda de vehículos eléctricos, la falta de apoyo gubernamental hacia la transición del vehículo eléctrico y la creciente competencia, según ha avanzado Reuters.
La compañía estadounidense es el último fabricante de automóviles después de Nissan, Stellantis y GM en reducir costes, mientras la industria lucha con la creciente competencia de los rivales chinos en Europa, la disminución de la demanda en China y los desafíos de cambiar a coches eléctricos que siguen siendo demasiado caros para la mayoría de los consumidores.
Ford ha anunciado que los 4.000 despidos se producirán principalmente en Alemania y el Reino Unido. A nivel mundial, los despidos representan alrededor del 2,3% de la plantilla de 174.000 empleados de Ford.
Las medidas serán un duro golpe, sobre todo para Alemania, la mayor economía de Europa y el principal fabricante de automóviles, donde Volkswagen abre una nueva amenaza con cerrar plantas, recortar salarios y eliminar miles de puestos de trabajo para mejorar su capacidad de competir.
La profundización de la crisis política del país también añade incertidumbre a las empresas que luchan contra las crecientes tensiones comerciales con China y la victoria electoral estadounidense de Donald Trump.
Ford señaló que los despidos europeos deberían tener lugar a finales de 2027.
Las marcas de automóviles europeas "se enfrentan a importantes obstáculos económicos y competitivos y, al mismo tiempo, a un desajuste entre las regulaciones de CO2 y la demanda de vehículos eléctricos por parte de los consumidores", afirmó la compañía en un comunicado.
Hasta septiembre de este año, las ventas de Ford en Europa cayeron un 17,9%, superando ampliamente la disminución del 6,1% de la industria en su conjunto. Ford también pidió al gobierno alemán que proporcione más incentivos y una mejor infraestructura de carga para ayudar a los consumidores en la transición a los vehículos eléctricos.
"Lo que nos falta en Europa y Alemania es una agenda política inequívoca y clara para avanzar en la movilidad eléctrica, como inversiones públicas en infraestructura de carga, incentivos significativos... y una mayor flexibilidad para cumplir los objetivos de cumplimiento de CO2", escribió el director financiero de Ford, John Lawler, en una carta al gobierno alemán.
Ford ha estado atravesando una dolorosa reestructuración en Europa, anunciando 3.800 recortes de empleo en febrero de 2023. Además, también cerrará su planta de Saarlouis en Alemania el próximo año, con más recortes de empleo.