Ouigo llega a Andalucía, cinco años y 40M a fondo perdido después, mirando a la segunda liberalización ferroviaria
- La compañía abre con colapso la venta de billetes para viajar a partir del 16 de enero. Zanja así la liberalización del corredor sur, el "más maduro" de España.
- Más información: Ouigo comenzará a operar en Andalucía el 16 de enero para conectar Madrid con Sevilla y Málaga
Ouigo tiene por fin fecha para su estreno en Andalucía. Será el próximo 16 de enero cuando comiencen los viajes entre Madrid y Sevilla y Madrid y Málaga, ambas siempre con parada en Córdoba. Es el fin de un enrevesado camino para la francesa, la última en llegar al sur y zanjar por tanto la liberalización de este corredor, en el que ya compiten Iryo y Renfe con Avlo y AVE. Ahora, mira con interés a la segunda fase.
Han sido precisos cinco años y una inversión a fondo perdido de 40 millones para que Ouigo completara el desembarco andaluz. En el proceso no han faltado tampoco retrasos, tanto en la entrega de trenes como en la intención de la propia compañía en arrancar operaciones -hasta hace semanas insistía en que sería antes de Navidad- e incluso, como guinda, el colapso de la web en las primeras horas de venta de billetes.
La caída online, debido al elevado tráfico de la web, llegaba pocos minutos después de que Federico Pareja, responsable de comercial, marketing y comunicaciones de la empresa, insistiera en que los precios partirán de 9 euros para adultos, con una tarifa fija de 7 euros para menores de hasta 13 años.
"Somos conscientes de que las expectativas son muy altas, y hemos trabajado incansablemente para llegar cuanto antes", ha remarcado Pareja.
Están seguros de que el precio es su factor diferencial y van a por todas con el corredor sur, donde, según datos de la plataforma de venta Trainline, los precios ya han bajado gracias a la competencia un 24% en la línea Madrid-Sevilla y un 18% en la de Madrid-Málaga.
Ouigo cree que su llegada puede reducir los precios medios un 16% adicional. Con ese espíritu llegan a Andalucía, la pieza que les faltaba en España dentro de la primera liberalización ferroviaria, aunque, admiten, tienen ya la atención puesta en lo que pueda suceder de cara a la segunda, cuyo calendario y reglas se espera que publique Adif en el primer trimestre de 2025.
La idea es dar entrada a la competencia en tres corredores: Madrid-Galicia, Madrid-Asturias/Cantabria y Madrid-Cádiz/Huelva. "Estamos analizando la información", ha asegurado Pareja.
"Interés existe, y mucho, para ver qué hacer y cómo se podría entrar", ha sostenido. Pero antes será necesario un estudio en profundidad porque, matiza, hay "limitaciones técnicas", como el ancho de la via y el voltaje, y además esta segunda liberalización no se ha configurado de la misma manera, "con lo cual requiere de un cierto análisis detrás".
En todo caso, Pareja ha insistido en que la red "se puede aprovechar mucho más" y ha remarcado que se han demostrado ya los beneficios para el cliente de que haya liberalización. "Hay mercado", zanja.
Andalucía, una carrera de obstáculos
Pareja se basa en lo visto ya con los restantes corredores, que se ha repetido en el sur antes de su entrada. De acuerdo con los datos de Trainline, desde 2023 se ha incrementado en un 130% el número de viajeros en la ruta Madrid-Málaga, y un 80% en la ruta Madrid-Sevilla.
Todo con la entrada de Iryo y Avlo en el mercado. Según refleja Competencia en su informe más reciente, que analiza los datos del segundo trimestre de este año, en la conexión Sevilla y Madrid es Renfe la que ostenta mayor cuota de mercado (66,7%), seguida de Iryo (28,2%) y Avlo cierra con un 5,1%.
Son cifras muy similares a las de la ruta Madrid-Málaga. Renfe ostenta aquí el 64,9% de la cuota, seguida de Iryo, con un 28,2% y Avlo, con 6,8%.
A este escenario llega Ouigo, que ha reiterado durante meses su deseo de entrar en Andalucía cuanto antes. Las esperanzas en este corredor se basan, explica Pareja, en su madurez.
El viajero de esta ruta, sostiene, tiene mucho más desechada la idea de ir a Madrid en coche o avión; el tren es su medio preferente, una idea que germinó en 1992, cuando España estrenó la alta velocidad, precisamente, en el trayecto entre Madrid y Sevilla.
Por eso la expectativa. Ouigo se ha aferrado a ella para llegar, aunque en este destino la cuenta final le haya resultado más abultada de lo esperado. La compañía ha destinado 40 millones de euros de inversión sólo para adaptar 6 de sus 16 trenes al sistema de seguridad LZB, exclusivo de esta primera línea de alta velocidad de España y el gran escollo para su llegada.
Es una inversión que no podrán amortizar, subrayan; en dos años se habrá actualizado la vía andaluza al sistema europeo ERTMS. El gasto es por tanto "a fondo perdido", apunta la empresa, que en total ha invertido para operar en España 700 millones de euros, más 1.000 millones de euros que tiene presupuestados para pagar en concepto de canon a Adif durante una década.